Los ministros de finanzas del euro estarían dispuestos a renegociar el rescate que acaba el día 28 de febrero, pero sólo si cumple las condiciones. Si no se acuerda una nueva extensión, Atenas quedaría el 1 de marzo sin ningún tipo de cobertura y sin el último tramo de 1.800 millones de euros. La prórroga debe ser pedida por Grecia, ya sea por el nuevo Gobierno o por el Gobierno en funciones.

En esa misma línea se ha manifestado el presidente del Bundesbank, Jen Weidmann, asegura que si no los respeta no recibirá más dinero. El presidente de Francia, Francois Hollande, ha felicitado a Tsipras, y espera que ambos países mantengan su cooperación al servicio del crecimiento y la estabilidad de la zona euro. El primer ministro británico, David Cameron, ha augurado que la victoria de Syriza aumentará la incertidumbre económica en Europa. Y el ministro de Economía, Luis de Guindos, ha señalado que la situación de España no es comparable con la de Grecia. Asegura que no habrá efecto contagio.

La troika, de la que forma parte además el Banco Central Europeo (BCE) suspendió a finales de diciembre por medio del FMI, las conversaciones con Atenas hasta que hubiera un nuevo Gobierno. Una precondición para una nueva extensión es que Atenas lo solicite formalmente y para ello la petición debe llegar a las capitales por un interlocutor legitimado, ya sea a través de un Gobierno saliente o uno nuevo.