Un nuevo ejemplo del apetito inversor por las compañías relacionadas con la inteligencia artificial. El mercado ha recibido con mucha euforia a Moore Threads, un fabricante de chips chino, que se ha beneficiado de los esfuerzos de Pekín por reducir la dependencia tecnológica de los gigantes estadounidenses.
¿Un nuevo síntoma de burbuja? La compañía Moore Threads se dispara en su debut en la Bolsa de Shanghai.
La compañía, fundada por un antiguo alto ejecutivo de Nvidia, ha vivido un espectacular aumento del 425% en su primer día de cotización. Esta subida refleja la confianza de los inversores en la estrategia del gobierno chino para fomentar el desarrollo de capacidades locales de inteligencia artificial, disminuyendo la dependencia del líder tecnológico estadounidense.
Moore Threads ha cerrado hoy en los 600,5 yuanes (85 dólares), muy por encima de su precio inicial de 114,28 yuanes. Con su Oferta Pública Inicial en el Star Market de Shanghái (el mercado de valores enfocado en tecnología), la empresa con sede en Pekín lograba recaudar 8.000 millones de yuanes, con lo que se convertía en la segunda mayor OPI de China continental en lo que va de año.
La clave está en el contexto geopolítico. Las acciones de las empresas chinas de diseño y fabricación de chips han visto un rally este año mientras Pekín redobla sus esfuerzos para establecer una cadena de suministro local y autosuficiente para los componentes esenciales del boom de la inteligencia artificial.
La escalada de las tensiones comerciales ha llevado a Washington a prohibir la venta de los procesadores de IA más avanzados de Nvidia a China. En respuesta, Pekín ha instado a sus propias empresas tecnológicas a buscar alternativas domésticas.
Un mercado en auge
Los analistas de Bernstein estiman que, este año, Moore Threads generará unas ventas de chips valoradas en 58 millones de dólares. Este monto contrasta con los aproximadamente 10.000 millones de dólares que se espera que vendan tanto Huawei como Nvidia, cada uno.
Las previsiones para 2026 indican un crecimiento de las ventas de Huawei hasta los 12.000 millones de dólares, lo que podría representar cerca de la mitad del mercado chino de chips de IA, mientras que se proyecta que Moore Threads alcance los 93 millones de dólares.
Debido a las restricciones impuestas por Washington, se anticipa que las ventas de Nvidia en China caerán a 2.000 millones de dólares el próximo año. Esto llevaría a su cuota de mercado a disminuir drásticamente del 40% en 2025 al 8%.
Actualmente, los legisladores estadounidenses debaten si deberían permitir que Nvidia comercialice en China sus chips H200, de menor rendimiento, argumentando que mantener a las empresas chinas dependientes de la tecnología estadounidense es clave para asegurar el liderazgo de EE. UU. en IA.
El gobierno chino exige que los nuevos proyectos de centros de datos que hayan recibido fondos estatales utilicen solo chips de fabricación nacional, lo que afecta a las estadounidenses Nvidia, AMD e Intel.