Alerta climática grave: Los niños nacidos ahora vivirán menos que nosotros a causa del cambio climático. Si no hacemos cambios, la esperanza de vida y el bienestar logrado por la humanidad se verán seriamente afectados.

Es la preocupante conclusión que arroja el informe The Lancet Countdown 2019, elaborado por 120 expertos de 35 instituciones, universidades y centros de investigación de todo el planeta, entre ellos la propia OMS. Cada año estudian 41 indicadores para evaluar los efectos concretos sobre la salud, causados por el cambio climático.

Si no se cumplen los compromisos del Acuerdo de París, el calentamiento global condicionará la salud de las futuras generaciones.

El estudio plantea dos escenarios, uno en el que sí se cumplen esos pactos y por tanto se consigue limitar el aumento de la temperatura del planeta.

Si no se hace ningún control (ese sería el segundo escenario, el de la inacción) un niño nacido hoy verá que al cumplir los 70 años la temperatura habrá aumentado de media en 4 grados. Esto traerá graves consecuencias y en gran parte impredecibles.

Más enfermedades, menos comida

Se verán más afectados por enfermedades infecciosas, debido a que el sistema inmunitario infantil aún está en proceso de desarrollo, los niños son más susceptibles a enfermedades y a contaminantes medioambientales.

A mayor temperatura, habrá mayores desastres climáticos, como sequías o lluvias torrenciales. Esto afectará a las cosechas globales y redundará en una peor alimentación. También esos fenómenos de sequías, o inundaciones, propiciarán un aumento de las enfermedades infecciosas y diarreicas, donde los más afectados serán de nuevo los niños.

De hecho esto ya está pasando: según el informe, 2018 fue el segundo año con las condiciones climáticas más adecuadas registradas para la propagación de las bacterias. Una temperatura del agua elevada y la baja salinidad han aumentado casi un 10% en todo el planeta en los últimos 40 años, lo que abre la puerta a una mayor probabilidad de brotes de cólera.

Lo mismo ocurre con las enfermedades transmitidas por mosquitos, como el dengue. Debido al aumento de las temperaturas, el mosquito que porta esta enfermedad se ha trasladado a nuevos territorios en Europa.

Otra mala noticia es que va a empeorar la calidad del aire, lo que va a causar un aumento en enfermedades respiratorias como el asma y aumentará el riesgo de sufrir infartos y apoplejías.

El informe señala que si bien esto afectará sobre todo a los países en vías de desarrollo, otros como España no están preparados para afrontar estas consecuencias.

Uno de los autores del estudio alerta: o actuamos ya para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero o los avances logrados en bienestar y esperanza de vida a lo largo de siglos se verán comprometidos.

Madrid se prepara para acoger la próxima cita importante en materia de cambio climático. La Cumbre del Clima, cuyo nombre oficial es COP25, costará 60 millones y atraerá otros 100 a Madrid, según pronósticos del Gobierno.