Mario Draghi es para muchos el artífice de la recuperación en Europa. Una Europa cuya economía todavía depende del crédito barato y por eso el BCE extiende sus compras de bonos para alejar cualquier expectativa de un aumento en los costes de endeudamiento.

Era el año 2012 cuando las palabras de Mario Draghi se convirtieron en un soplo de aire fresco para el Viejo Continente. Europa se resentía por los cuatro costados con Grecia a punto de salir del grupo. "Hay otra cosa que les quiero decir hoy: a través de nuestro mandato, el BCE está dispuesto a hacer lo que haga falta para preservar el euro. Y creedme, será suficiente", decía Draghi.

Entonces, el mercado se tomó de forma muy positiva el mensaje del BCE. Al fin llegaba la artillería pesada que reconduciría el camino de Europa. Se espera que la inflación permanezca por debajo del objetivo del BCE por debajo del 2% hasta al menos la segunda mitad de 2019.

Escuche la entrevista a Daniel Lacalle sobre la política monetaria del BCE.