Pero, ¿por qué nadie acertó? Enrique Verdeguer, director de ESADE Madrid, cree que "lo que explica la desviación de las previsiones es fundamentalmente el comportamiento de la economía mundial y de las economías de la zona euro y la UE que han sido mejores de lo esperado". También afecta la estabilidad de los tipos de interés y el efecto de la incertidumbre política, añade.
Los gabinetes de estudios de Repsol y la agencia de rating Axexor fueron los más atinados, con una estimación de crecimiento del 2,6%. Las previsiones menos atinadas correspondieron a Ceprede (1,9%), Intermoney (2%), FMI (2,1%) y el Instituto Flores de Lemus (2,1%). Tampoco acertaron el Gobierno ni el Banco de España.