El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha declarado que planteará un impuesto a la banca y otro a las transacciones financieras para contribuir a costear las pensiones en España. Esta forma parte de las diez propuestas que los socialistas perseguirán este año.


El líder de la oposición ha manifestado en su discurso que considera "justo" que la banca apoye a los trabajadores después de que estos contribuyeran al rescate del sector bancario con dinero público en 2012.


"Si los españoles contribuyeron con el sudor de su frente al rescate de la banca, es justo que ahora sea la banca quien ayude a sostener el sistema de pensiones", ha declarado Sánchez.


Además ha añadido "No queremos subir las cotizaciones, queremos abrir nuevos canales", que ha manifestado que no perseguirá que se adelanten los comicios de 2020, sino que hará oposición desde el Parlamento y los gobiernos autonómicos.


El impuesto aportaría entre 800 y 1.000 millones anuales y estaría en la línea de otros impuestos similares en países como Reino Unido y Francia y al exigido por organismos como el FMI o la UE.


Además, Sánchez planteará en febrero un "presupuesto alternativo" al que está elaborando y negociando el Gobierno de Rajoy, que en su opinión supondrá nuevos recortes este año.


Varios organismos, encabezados por la OCDE, han advertido de que debería reformarse el sistema de pensiones para mitigar el efecto del envejecimiento en España, donde según la ONU habrá 76 personas mayores de 65 años por cada 100 personas de entre 20 y 64 años en 2050, frente a las 30 de la actualidad.


El  Gobierno rechaza la propuesta


El secretario de Estado de Presupuestos, Álvaro Nadal, no comparte la idea del secretario general de PSOE de crear un impuesto para la banca para sostener las pensiones. "Lo que sostiene las pensiones no son impuestos, que destruyen empleo y reducen el crecimiento, sino las aportaciones de empresarios y trabajadores al sistema de seguridad social porque quién no estaba trabajando, ahora está trabajando", dijo Nadal en declaraciones a los medios en Bruselas.