El director de comunicación de Crédito y Caución, Pavel Gómez del Castillo, ha presentado su último informe en el que aseguran que el 18% de las empresas españolas sufre impagos significativos durante 2020. Y eso, a pesar de las inyecciones de liquidez y los estímulos fiscales que ha recibido el tejido empresarial para paliar los efectos económicos del Covid-19.

Explica Gómez del Castillo que esta es la primera conclusión de la oleada de primavera del Estudio de la Gestión del Riesgo de Crédito en España, que impulsan Crédito y Caución e Iberinform. Destaca que ha afectado a la tesorería y a la capacidad de supervivencia de las empresas.

Desvela el estudio que 86% de las empresas en la primera fase de la pandemia tuvieron que retroceder en su actividad productiva y comercial. Asegura que las ayudas han permitido que la morosidad no se transmitiera a otras empresas con las que tienen relación.

Escucha aquí la entrevista con Pavel Gómez del Castillo:

El informe de Crédito y Caución

El 18% de las empresas ha sufrido impagos significativos durante 2020

Se espera un cambio de tendencia

Esta hibernación económica fue muy relevante para el 43%, que tuvo que renunciar a más de la mitad de su operativa habitual. En ese contexto de sobrecapacidad, el 49% de las empresas españolas ha percibido a lo largo de 2020 un deterioro de los niveles de solvencia de sus clientes.

Hay que destacar que el 56% del tejido productivo ha registrado una disminución de sus ventas. El impacto final de la pandemia sobre la facturación en 2020 se ha moderado respecto a las previsiones iniciales de las empresas.

Hace un año, cuando establecieron estrictas medidas de distanciamiento social y cierres temporales de la actividad empresarial, el 72% esperaba caídas de su facturación. Estas previsiones ya se suavizaron hasta el 61% en otoño, en plena reactivación de la actividad a partir del tercer trimestre.

Por último destaca el texto que el tejido productivo muestra su confianza en un cambio de tendencia en 2021. Un 53% de las empresas espera que sus niveles de facturación vuelvan a remontar, frente a un exiguo 14% que espera que este ejercicio sea peor que el anterior en términos de ingresos.