La cadena estadounidense ha obtenido un beneficio neto de 702 millones de dólares en su año fiscal. Supone un 9,5% menos que en el periodo anterior, cuando alcanzó los 776 millones de dólares. Y esto a pesar de que las ventas de la firma de moda han crecido un 2,3%, hasta alcanzar los 7.451 millones, impulsadas por las cuentas del cuatro trimestre del ejercicio.
En el último periodo del año, el beneficio neto de la firma ha sido de 124 millones de dólares, un 18,9% menos, pero sus ventas han crecido más de un 1%, hasta 1.848 millones.
Desde la directiva de Ralph Lauren los mensajes son optimistas y destacan el buen progreso de las iniciativas estratégicas fiscales de 2015. El grupo ha abierto varias tiendas en mercados clave por todo el mundo y ha impulsado determinadas marcas.
La compañía cierra el ejercicio con una red formada por 466 tiendas de explotación directa y una facturación anual en canal retail de más de 3.900 millones de dólares, un incremento del 4,2% respecto al año anterior.