La nueva presidenta de CEPYME, Ángela de Miguel, ha lanzado un contundente diagnóstico sobre los grandes problemas que asfixian a las pequeñas y medianas empresas españolas en una entrevista concedida a Capital Radio. "Llevamos unos años especialmente delicados, sobre todo para la pyme, que vemos que cada día desaparecen diez pymes al día en España", afirma De Miguel, quien ha asumido el cargo en un momento de alta tensión política y económica.
Ángela de Miguel, nueva presidenta de CEPYME, advierte sobre la crítica situación de las pequeñas empresas y el impacto devastador que tendría la reducción de jornada laboral.

Datos alarmantes: microempresas en pérdidas mientras las grandes crecen
Durante la entrevista, De Miguel ha identificado tres obstáculos fundamentales que impiden el desarrollo de las pequeñas empresas. "El primero, la complejidad, las cargas burocráticas, la complejidad de los trámites, la lentitud también en la obtención de licencias, permisos y autorizaciones", explica, añadiendo que "la empresa más pequeña no tiene recursos ni personal para poder gestionar toda la cantidad de requerimientos y requisitos".
"Mi marido, que es agricultor, dice que dedica más tiempo haciendo papeles que en el campo. Realmente no tiene ningún sentido que alguien que su actividad principal es conseguir que nosotros podamos comer cada día tenga que dedicar más tiempo a cumplimentar documentos"
El segundo problema, según De Miguel, es "la excesiva carga fiscal". "Estamos hablando de que el esfuerzo fiscal de la empresa española está en un 37%, el de la media europea en un 25. Con lo cual tenemos un esfuerzo fiscal que cae sobre todo en la empresa más pequeña un 50% mayor que la media europea", subraya.
Finalmente, señala como tercer gran obstáculo "los costes laborales y la complejidad de nuestra normativa laboral", destacando que "en los últimos cuatro años los costes laborales se han incrementado un 20%".
"El 50% de las empresas de nueva creación no sobreviven cinco años"
La amenaza de la reducción de jornada laboral
Respecto a la propuesta de reducción de la jornada laboral, De Miguel es tajante: "Esperamos que no salga. De hecho, estamos intentando explicar a todo el mundo el impacto que tendría esta reforma". Según sus palabras, esta medida supondría "un coste añadido" en un momento crítico.
Las consecuencias, según la presidenta, serían claras: "Tienes dos opciones: o subes los precios o cierras, porque uno no puede estar con unas pérdidas de un 8% o un 7%. La empresa no puede tener pérdidas, esto son matemáticas. Son ingresos menos gastos, igual que nuestras casas. No hay ninguna diferencia".
Ángela de Miguel ha destacado su objetivo de dar más visibilidad a la crítica situación de las pymes: "Queremos que la voz de la pyme se oiga en Europa y a nivel internacional. Hay que contar esta situación, que se sepa la dramática situación que vive la pyme y que la pyme de alguna manera se sienta representada y que sepa que hay alguien que por lo menos está contando lo que ellos sufren día a día".
"La microempresa, la de menos de diez trabajadores, en el último año ha perdido 3.000 empleos, mientras que la gran empresa ha contratado 300.000 (...) Menos mal que tenemos a las grandes empresas liderando la economía española porque si no tendríamos un verdadero drama"