Más de un millón de espectadores, cuatro días de entrada a precios de risa y unas palomitas calientes esperando en la butaca. No es un sueño, es la Fiesta del Cine, el evento que, año tras año, transforma los pasillos en un hervidero de cinéfilos. Este lunes 3 de noviembre ha arrancado la ansiada vigesimoquinta edición hasta ayer jueves 6. Cuatro días en los que el público ha podido disfrutar de la cartelera completa por tan solo 3,50€ por entrada.

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A pie de calle | La Fiesta del Cine

Cuatro días en los que el público ha podido disfrutar de la cartelera completa por tan solo 3,50 euros por entrada. ¿El objetivo? Fomentar la asistencia a los cines.

Con la colaboración de la Federación de Cines de España y el Ministerio de Cultura, distribuidores y salas aspiran a fomentar la asistencia a cines como un hábito sociocultural y a recobrar una afluencia de público que sigue sin alcanzar los niveles previos a la pandemia.

¿Vamos menos al cine?

Aunque la última edición de este festival reunía la cifra más alta desde 2019 con casi 1,3 millones de espectadores, queda lejos aún de los 1,85 millones de asistentes de la primavera de aquel año. Además, si miramos al cine más allá de esta semana, en 2024 los españoles comprábamos de media apenas 1,5 entradas al año, la cifra más baja desde que hay registros, sin contar con la pandemia, según apunta la Sociedad General de Autores y Editores.

Pero, ¿por qué vamos menos al cine? Según una encuesta del Ministerio de Cultura, las principales razones son la falta de tiempo y el precio. Durante los últimos años, los espectadores se han quejado del elevado precio de las entradas de cine que hoy ya se sitúan entre los 8 y 9 euros de media cuando hace un año se encontraban en los 6,50 euros.

A esto se le suma un factor que ha dado de qué hablar últimamente: la comida y bebida en el cine. Múltiples usuarios han denunciado en redes sociales que algunos cines no permiten acceder a la sala con comida de fuera y se incrementa el enfado tras observar cómo las palomitas y refrescos que ofrecen pueden valer más incluso que la propia entrada, como denuncia La Federación de Consumidores en Acción.

El eterno debate: cine vs plataformas de streaming

Si hay algún otro sitio al que mirar ese es el streaming, pero ojo, no significa que sea culpable. Estos servicios salvaron la industria durante la pandemia en un momento donde las salas de cine pendían de un hilo.

Ahora bien, el debate llega cuando el que era salvador se ha convertido en verdugo, aunque sin pretenderlo, de las salas de cine. No lo decimos nosotros, lo dice una encuesta de HarrisX, que ha revelado que casi siete de cada diez adultos prefieren consumir su contenido a través de plataformas que en las salas de cine.

¿Significa esto que es el fin de la gran pantalla? No necesariamente. Mientras que las plataformas operan bajo un modelo de suscripción, la industria del cine se ha adaptado a un modelo híbrido que beneficia a ambas, ya que muchos estrenos suelen tener primero un paso por salas durante mes y medio para después estar disponibles en plataformas.

Aun así, las cifras no mienten, y es que en el primer semestre del año el cine español conseguía facturar casi 30 millones de euros, ocho millones más que en 2024, aunque eso sí, muy lejos de cifras como las de Netflix, que además de continuar su dominio en el mercado español del streaming, cerraba el año pasado con una facturación de 786 millones de euros en nuestro país.

El cine sigue adaptándose a este nuevo paradigma y por eso proponen iniciativas para fomentar la asistencia. Por ejemplo, los mayores de 65 años tienen acceso los martes a toda la cartelera por tan solo 2 euros. También está el famoso día del espectador, por el que todos los miércoles podemos disfrutar de la mejor experiencia cinematográfica de forma más económica.

A pesar de esta crisis, ver una película en la gran pantalla sigue siendo toda una experiencia única que el streaming no puede replicar, al menos por ahora, ya que mientras sigan existiendo fenómenos como el Barbenheimer y entradas a 3,50 euros, la industria del cine seguirá dando de qué hablar.