La Comunidad de Madrid atesora cinco bienes declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO, tres de ellos ciudades históricas que bien merecen más que una visita de día: Aranjuez, Alcalá de Henares y San Lorenzo de El Escorial. Estos tesoros culturales, situados a menos de una hora del centro de Madrid, combinan patrimonio histórico, gastronomía local y entornos naturales que invitan a contemplar y descubrir a otro ritmo.
Aranjuez: un paraíso real a orillas del Tajo
Ubicada en el sur de la región, limitando con Toledo, Aranjuez fue designada como Real Sitio por Felipe II en 1560 y reconocida como Patrimonio de la Humanidad en 2001. "Aranjuez fue una ciudad diseñada para disfrutar y desconectar", explica María Belmonte, concejala de Turismo, quien invita a los visitantes a "quedarse al menos dos o tres días para enamorarse realmente del lugar".
Hablamos con María Belmonte, Concejala Delegada de Obras y Servicios, Turismo, Fiestas y Medios de Comunicación del Ayuntamiento de Aranjuez
El Palacio Real, iniciado en el siglo XVI y finalizado dos siglos después durante el reinado de Carlos III, preside un conjunto monumental excepcional. A su alrededor, los jardines históricos ofrecen un espectáculo cambiante con las estaciones, siendo el otoño un momento especialmente mágico para visitarlos. "Tenemos un total de 111 hectáreas visitables. El Jardín del Príncipe es el mayor jardín vallado del sur de Europa", destaca Belmonte.
Entre los imprescindibles, la concejala recomienda visitar el Palacio Real, los Jardines del Parterre (actualmente en restauración), el Jardín de la Isla y la Casa del Labrador, recientemente reabierta tras tres años de rehabilitación donde se han descubierto pinturas y murales que estaban ocultos. El casco histórico, con sus calles arboladas, completa una experiencia urbana que invita al paseo sin prisas.
La conexión con Madrid es sencilla a través de Cercanías o, para una experiencia más especial, a bordo del histórico Tren de la Fresa, que recrea el trayecto de la segunda línea de ferrocarril de la península con vagones antiguos de madera y en ocasiones traccionado por locomotoras históricas.
La huerta de Aranjuez es legendaria, con productos emblemáticos como las fresas, espárragos y alcachofas que pueden degustarse en los numerosos restaurantes de calidad. "Ese buen producto lo dejamos en manos de los magníficos profesionales que tenemos en la restauración de Aranjuez, y lo acompañas con esos fabulosos vinos de nuestras bodegas", recomienda la concejala.
El enoturismo también tiene su espacio con las bodegas de Real Cortijo, construida por orden de Carlos III para producir vino y aceite para la Casa Real, y El Regajal, situada en una reserva natural donde pueden visitarse los viñedos y disfrutar de espectaculares miradores.
Alcalá de Henares: la ciudad de las tres culturas
"Alcalá enamora", asegura Isabel Ruiz, concejala de Turismo de esta ciudad universitaria que fue cuna de Cervantes. Con más de 2.000 años de historia, Alcalá conserva vestigios de la ciudad romana de Complutum, del periodo musulmán y del esplendor cristiano, en un conjunto urbano que fue declarado Patrimonio de la Humanidad junto con su universidad.
Hablamos con : Isabel Ruiz Maldonado: Primera teniente de alcaldesa y concejala de Turismo del Ayuntamiento de Alcalá de Henares
Entre sus tesoros destaca "la calle con los pórticos más larga del mundo", la famosa Calle Mayor, que conecta la Plaza de Cervantes con la Plaza de los Santos Niños, donde se encuentra la Catedral Magistral. "Es una calle que te traslada a la época medieval, a la época de Cisneros, y por la que han paseado tantos autores: Quevedo, Tirso de Molina, Don Miguel de Cervantes", explica Ruiz.
La Universidad, fundada por Cisneros a principios del siglo XVI como "la primera ciudad universitaria del mundo", conserva joyas como el Paraninfo donde se entrega el Premio Cervantes, la Capilla de San Ildefonso y su impresionante fachada plateresca. Otros lugares destacados son la Casa Museo de Cervantes, el Corral de Comedias del siglo XVII (uno de los teatros más antiguos de Europa), y el Museo Arqueológico.
Alcalá ofrece experiencias culturales durante todo el año, como el Mercado Cervantino en octubre (coincidiendo con el aniversario del bautismo de Cervantes), el Mercado Romano en mayo, su reconocida Semana Santa y una Navidad mágica con pista de hielo y mercado navideño. El Tren Cervantino permite llegar desde Madrid con guías caracterizados que van narrando la historia de la ciudad.
La ciudad también despunta como destino de turismo MICE (reuniones, incentivos, convenciones y eventos), con espacios como el Parador y el Complejo El Olivar, y acogerá el próximo 2 de diciembre el primer Congreso Internacional de Periodismo de Viajes, coincidiendo con el 27 aniversario de su declaración como Patrimonio de la Humanidad.
San Lorenzo de El Escorial: donde la historia dialoga con la naturaleza
Conocido como la "octava maravilla del mundo", el Monasterio de El Escorial, construido por deseo de Felipe II tras la victoria en la batalla de San Quintín, es el corazón de este enclave situado al pie del Monte Abantos. Patricia Partida, concejala de Turismo, define San Lorenzo como "un lugar de detalles" que invita a quedarse varios días para descubrir toda su esencia.
Hablamos con Patricia Partida Becerril, Concejal delegada de Turismo, Medio Ambiente y Bienestar Animal y Régimen Interior del Ayuntamiento de San Lorenzo de El Escorial.
"Si nos parece grande ahora, imaginemos para la época, siglo XVI, una obra totalmente desproporcionada. Y solo tardaron 21 años en construirla", señala Partida, quien destaca que el monasterio "alberga una gran parte de lo que fue la cultura española en su momento y de lo que sigue siendo".
Más allá del impresionante monasterio, el conjunto incluye las Casas de Oficios, la Casa de la Compaña, la Casita del Infante, el teatro Coliseo de Carlos III y un casco histórico lleno de edificios de los siglos XVI y XVIII. "No es solo la grandiosidad, son las calles de atrás, el callejear, el meterte", explica la concejala, quien recomienda contemplar el amanecer desde el estanque como una experiencia "única y mágica".
El entorno natural es otro de los grandes atractivos, con el Pinar de Abantos y el Bosque de la Herrería declarados paisaje pintoresco en 1961. Lugares como la Silla de Felipe II, desde donde el monarca supervisaba las obras, ofrecen vistas espectaculares del monasterio y su entorno. Para los amantes de la naturaleza, el municipio cuenta con el Arboreto Luis Ceballos, el museo Insect Park y numerosas rutas de senderismo.
San Lorenzo celebra fiestas de interés turístico como el Belén Monumental, la Semana Santa, la Travesía de las Cumbres Escorialenses y la Romería de la Virgen de Gracia, la única declarada de interés nacional.
Una experiencia completa para todos los públicos
Las tres ciudades coinciden en recomendar pasar al menos una noche para disfrutar plenamente de su oferta. Como señala Patricia Partida: "Muchas veces nos centramos únicamente en los monumentos principales, pero de verdad hay muchos pequeños detalles, hay muchos lugares muy especiales. Es necesario quedarse varios días para poder vivir realmente estos lugares. También conocer un sitio es conocer a su gente, conocer cómo vive".
A tan solo 40 minutos del centro de Madrid, estos tres tesoros patrimoniales ofrecen una alternativa al turismo de la capital, con la posibilidad de disfrutar de historia, cultura, gastronomía y naturaleza en entornos más tranquilos y auténticos. Una oportunidad perfecta para redescubrir la riqueza cultural de la región en cualquier época del año.