El Banco Mundial, en colaboración con la Cámara de Comercio de España, ha publicado la segunda edición de su "Enterprise Survey" en España, un estudio que identifica los grandes obstáculos que limitan el crecimiento empresarial en el país.
Según Raúl Mínguez, director del Servicio de Estudios de la Cámara de Comercio, el 35% de las empresas españolas consultadas citan la falta de capacitación laboral como su principal obstáculo para crecer.
El Banco Mundial, en colaboración con la Cámara de Comercio de España, ha publicado la segunda edición de su "Enterprise Survey" en España, un estudio que identifica los principales obstáculos que limitan el crecimiento empresarial en el país.
"El principal obstáculo que informan es precisamente el desajuste entre lo que necesitan sus procesos productivos en su día a día, con lo que desde el mercado laboral pueden obtener"
Esta preocupación supera el promedio de los países de altos ingresos y confirma lo que otros estudios ya venían indicando. "Hoy en día la principal preocupación de las empresas pasa por la disposición de trabajadores tanto en cantidad suficiente en algunas ocasiones y algunos sectores y territorios como con las habilidades y competencias adecuadas", destaca el experto.
Tras la baja cualificación de los trabajadores, la encuesta revela que la acción del Gobierno, a través de regulaciones y normativas, constituye otro importante obstáculo, junto con la carga impositiva. Mínguez explica que "las empresas consideran que puede suponer un condicionante de su actividad empresarial".
La burocracia también aparece como un factor limitante. "La carga burocrática, los trámites, los procedimientos que entraña llevar a cabo esa carga pueden suponer también un obstáculo", afirma el director de Estudios, aunque reconoce avances en este ámbito respecto a la edición anterior del estudio.
Productividad e innovación: luces y sombras
El informe destaca aspectos positivos en materia de productividad. "La generación de empleo a nivel de las empresas responde más a productividad que en otras economías, lo cual es positivo", señala Mínguez, quien también menciona que "en ocasiones esos aumentos de la productividad se traducen en un menor aumento de las remuneraciones en términos relativos" comparado con otros países.
En innovación, España ha avanzado notablemente desde la anterior oleada del estudio, situándose por encima de los países de ingreso alto, aunque "estamos todavía alejados de esa frontera, aquellos países que marcan y líderes en el ámbito de la innovación tecnológicos", reconoce el experto.
Un dato positivo es que solo el 5% de las empresas españolas consideran la inestabilidad política como un factor condicionante para su actividad, casi la mitad que en otros países europeos. Según Mínguez, "en términos comparados estamos mejor situados que otros países".
El estudio del Banco Mundial, realizado entre 1.431 empresas españolas de todos los tamaños y sectores con más de cinco empleados, constituye una valiosa herramienta para identificar los retos a los que se enfrenta el tejido empresarial español y orientar tanto a las propias empresas como a las administraciones públicas sobre las áreas que requieren atención prioritaria.