Por ahora es solo un proyecto, pero Dubái quiere levantar una ciudad mayorista valorada en 8.200 millones de dólares. Abarcará más de 51 millones de metros cuadrados, construidos cerca de un puerto y un nuevo aeropuerto, y será el principal centro mundial de actividad mayorista.

La ciudad se construirá, aunque en estos momentos, el emirato no pasa por una buena situación financiera. Se vio afectado por la recesión mundial y ahora por los bajos precios del petróleo. Aunque el crudo representa un pequeño porcentaje de la economía de Dubái, sus vecinos sí se han visto afectados por la bajada de los precios.

Este difícil momento se refleja en las calles de la región. Desde hace meses, miles de vehículos de lujo son abandonados en las calles. Sus propietarios los dejan aparcados, con las llaves puestas, por diversas razones: algunos han abandonado el país por problemas con la ley y otros no pueden pagar los impuestos.

Hay que recordar que, en los Emiratos Árabes, no existe la ley de quiebra y el impago de las deudas está considerado como un delito.

La economía sufre, pero Dubai quiere seguir adelante el macroproyecto, que persigue el objetivo de aumentar la cuota de mercado de los Emiratos Árabes en el sector del comercio mundial al por mayor. Según WAM, una agencia de noticias estatal, la intención es alcanzar los 4.900 millones de dólares, desde los 4.300 millones actuales.