El desconocimiento de los españoles sobre el sistema de pensiones ha quedado al descubierto en la última encuesta de Funcas, que revela que apenas uno de cada ocho adultos sabe cómo se financian las pensiones y tiene una idea aproximada de la prestación media de jubilación. Elisa Chuliá, profesora de Sociología de la UNED e investigadora de Funcas, califica estos resultados como "bastante descorazonadores", especialmente considerando que "este debate está abierto desde hace por lo menos 30 años", cuando se suscribió el Pacto de Toledo.

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Entrevista Funcas, con Elisa Chuliá

Funcas revela que solo uno de cada ocho españoles adultos sabe cómo se financian las pensiones. Hoy lo hablamos con Elisa Chuliá, investigadora de la fundación.

¿Por qué ese desconocimiento?

La investigadora atribuye esta desinformación a varios factores: "Las noticias relacionadas con la información económica no son del gusto de todo el mundo. Cerca de un 50% declara no tener ningún interés o tener poco interés en las noticias relacionadas con la economía", señala Chuliá.

Además, destaca que "el tema es complejo, pero hay algunas cuestiones básicas sobre las que los ciudadanos sí tendrían que estar informados". Entre ellas, que "las pensiones se financian con cotizaciones sociales actuales, no con las cotizaciones sociales que pagaron los actuales jubilados en su día ni tampoco con impuestos generales fundamentalmente".

Percepciones erróneas

Uno de los hallazgos más sorprendentes es la percepción errónea sobre la cuantía de las pensiones: "La gente cree que la pensión media de jubilación está por debajo del salario mínimo interprofesional", cuando en realidad es superior al SMI. "No solo no sabemos cómo se financian las pensiones, sino tampoco cuánto rinde el sistema. No se sabe que el sistema es relativamente generoso en términos actuariales", añade Chuliá.

Preocupación por el futuro

La encuesta también muestra una gran preocupación de los españoles por su futuro: "Hay una proporción bastante voluminosa, aproximadamente de 2/3 de la muestra encuestada, que muestra preocupación de que las pensiones vayan a bajar en los próximos años", explica la investigadora.

Respecto al papel de la inmigración en el sostenimiento del sistema, Chuliá señala que "la sociedad está dividida" exactamente a la mitad sobre si los inmigrantes contribuirán decisivamente a aportar sostenibilidad financiera al sistema.

En cuanto a la edad de jubilación, el rechazo a retrasarla es contundente: "Ahí el rechazo es altísimo y en algunos grupos de edad, sobre todo entre mujeres, llega al 90%. Los jóvenes no quieren ni oír hablar del retraso de la edad legal de jubilación".

"Para participar en un debate público, para entender los argumentos hay que disponer de una información mínima", concluye Chuliá, señalando que "no es responsabilidad única de la sociedad no disponer de esa información" y que todos los actores implicados tienen "parte" de responsabilidad en esta desinformación.