El banco alemán ha nombrado a un especialista en banca minorista Christian Sewing como su nuevo consejero delegado con efecto inmediato. Sewing, es un empleado de toda la vida de Deutsche Bank y marca el regreso de un alemán al cargo de consejero delegado por primera vez en 16 años.

Con 47 años, Sewing ha sido vicepresidente ejecutivo y tiene experiencia en banca minorista, auditoría y riesgo. En una carta que ha enviado a la plantilla, el nuevo consejero delegado señala que el banco debe ser más rápido en la toma de decisiones, debe eliminar la burocracia innecesaria y debe “recuperar el hambre de negocios”. En cuanto al plan de ajuste de costes, en nuevo consejero delegado ha subrayado que el límite de costes de 23.000 millones de euros “no es negociable”

La llegada de Sewing  se produce en un momento en el que banco y sus principales accionistas debaten el camino a seguir para la banca de inversión de Deutsche, donde los ingresos se han desacelerado y empleados clave han ido abandonando la entidad.  Nicolás López, director de análisis de MG Valores, explica los principales retos que tienen por delante el nuevo consejero delegado, sobre todo en la banca minorista y de inversión. El problema de Deutsche Bank es, a su juicio, la baja rentabilidad de sus distintas áreas:



Jonh Cryan ha estado a cargo del banco desde el 2015 y su mandato expiraba en 2020, pero los inversores han perdido la confianza en su capacidad de devolver al banco a la rentabilidad después de tres años consecutivos de pérdidas.

Las acciones de Deutsche Bank han reaccionado con subidas de un 4% en la apertura.