La continua guerra del fútbol entre los operadores de telefonía en España le ha sentado bien a Másmóvil. En la batalla por captar cliente, la marca amarilla vuelve a los beneficios en los primeros nueve meses del año al ganar 56,7 millones de euros, frente a las pérdidas de 148,1 millones del año pasado. Además, la compañía eleva sus objetivos para finales del ejercicio.

En un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el operador de telecomunicaciones ha reportado unos ingresos entre enero y septiembre de 1.038,3 millones, un 9% más que en el mismo periodo de 2017, y un resultado bruto de explotación (ebitda) de 228,5 millones, un 58% superior.

La compañía ha presentado un resultado neto ajustado de 106,2 millones, un 135% superior al de hace un año, que no tiene en cuenta el impacto de los intereses de deuda con Providence y ACS, impactos fiscales, ni otros costes no recurrentes o no relacionados con el negocio.

Tras estos resultados, MásMóvil ha actualizado e incrementado sus objetivos para el presente ejercicio. Así, la compañía espera elevar un 17% o más sus ingresos por servicios este año (el anterior objetivo era del +10%).

Gol por la escuadra

La nueva temporada futbolística ha traído un nuevo episodio en la guerra por el fútbol que ha erigido como grandes vencedores a Movistar y a MásMóvil. El gran derrotado fue Vodafone, que anunció en verano que abandonaba el fútbol.

En los dos meses de verano, la teleco británica perdió más de 225.000 líneas fijas y móviles. Clientes que ganaron Telefónica y MásMóvil, 120.000 y 115.000 respectivamente. Por su parte, Orange, que sí ofrece el fútbol, perdió unas 50.000 líneas.