El banco HSBC, el mayor de Europa, ha cerrado el 2018 con un crecimiento de ganancias “decepcionantes” dado el aumento de los costes y las caída de las acciones que han en una perspectiva todavía más débil en China y Gran Bretaña.

Pese a un último trimestre "desafiante" por el entorno exterior, el aumento en la facturación en todos sus negocios, especialmente en Asia, su principal mercado, ha hecho crecer los ingresos totales un 4,5 %.

HSBC ha registrado un aumento del 30,2% en sus beneficios atribuidos, unos 11.160 millones de euros. El beneficio antes de impuestos fue de 17.605 millones de euros, un 15,9 % mayor que el de 2017, mientras que los beneficios operativos crecieron un 17,3 % hasta los 15.364 millones.

Los ingresos operativos totales se situaron en 2018 en los 56.295 millones de euros, dato un 0,3 % menor al del año anterior. Según el presidente del Grupo HSBC, Mark Tucker, la entidad se encuentra en "una posición fuerte" y estos resultados "demuestran la salud subyacente del negocio".

Sin embargo, el banco se mantiene alerta ante los riesgos a la baja del entorno económico actual, las tensiones del comercio mundial y la trayectoria futura de las tasas de interés, según ha comentado el presidente ejecutivo, John Flint.

La desaceleración económica en China, exacerbada por su guerra comercial con los Estados Unidos, plantea un desafío para la estrategia de HSBC de destinar más recursos a Asia, donde ya genera más de las tres cuartas partes de sus ganancias. Y es que, las acciones de HSBC cayeron en Hong Kong un 2,7% tras publicar sus resultados.

En términos geográficos, Europa volvió a repetir como única región en la que HSBC registra un resultado negativo en lo que a beneficios antes de impuestos se refiere, con pérdidas de 721 millones de euros, aunque son un 56,3% menores a las de 2017.

Una de sus principales incertidumbres es el Brexit, y es que, el mayor banco de Europa también se ha resentido en Gran Bretaña, que ha crecido a su ritmo más lento en medio año durante tres meses hasta noviembre.

Respecto a sus dividendos, la entidad pagará 0,45 euros por acción ordinaria, la misma cantidad que tras el ejercicio de 2017 y con los dividendos totales prácticamente en los mismos niveles: bajaron un leve 0,06 % hasta los 9.019 millones de euros.

 

En cuanto al ratio de solvencia, el Tier 1 (recursos propios básicos) fue del 14 % en 2018, cayendo desde el 14,5 % de 2017 debido principalmente a "movimientos de divisas extranjeras adversos y al impacto del aumento en préstamos".

Al cierre del año, el aumento en préstamos concedidos se cifraba en un 1,95 %, situándose en los 869.096 millones de euros, mientras que los depósitos captados han caído un 0,13 % hasta los 1,206 billones de euros.