La actividad manufacturera toca máximos de cuatro meses en Japón, con un PMI adelantado de septiembre que sube desde los 52,2 puntos de agosto hasta 52,6, gracias al repunte de la demanda doméstica y de las exportaciones. El dato acumula 13 meses consecutivos en zona de expansión y alcanza el nivel más alto desde mayo. El PMI impulsa al alza al Nikkei de Tokio en un inicio de semana marcado por la cautela en las bolsas asiáticas, con mayoría de caídas en plena resaca de las elecciones en Alemania y Nueva Zelanda.

A pesar de la más que probable renovación de Angela Merkel como canciller preocupa entre los inversores el ascenso del grupo ultra Alternativa por Alemania. Mientras que en Nueva Zelanda, el partido nacional del primer minsitro, Bill English, gana las elecciones pero no logra asegurarse la mayoría del parlamento. El dólar kiwi, la moneda del país, cae a mínimos de la última semana, con los ivernes a la expectativa de las negociaciones para formar una coalición de gobierno.

El yen nipón se mantiene débil en su cruce con el dólar mientras los mercados japoneses siguen pendientes de la posibilidad de que se adelanten las elecciones en el país. Una decisión que el primer ministro Shinzo Abe podría anunciar hoy mismo, junto con un paquete de medidas de estímulo de unos 18.000 millones de dólares estimados para apoyar la economía. Pretende aumentar el gasto en partidas sociales, como educación y cuidado infantil.