La compañía ha conseguido volver a cotizar pasadas las 12:30 de la mañana y lo ha hecho con una caída de casi un 70% hasta los 0,28 euros por acción después de que el rango de fluctuación haya sido ampliado en tres ocasiones. Ha comunicado a la CNMV que Gonvarri Corporación ha dado por terminado el acuerdo de bases por considerar que no se cumplen las condiciones a las que estaba sujeto el acuerdo.

Señala que continuará el proceso de negociación con los bancos acreedores para alcanzar un acuerdo que garantice la viabilidad financiera de la misma al amparo del artículo 5 bis de la ley Concursal, que solicitará a la mayor brevedad. La compañía tiene ahora cuatro meses para evitar el concurso.


Ramón Forcada, director de análisis de Bankinter, nos ha ofrecido en Capital Radio su visión sobre la deuda de la empresa y la diferencia que se ha hecho, a su juicio errónea, sobre deuda con y sin recurso.

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El Grupo Gestamp, que tenía previsto inyectar en Abengoa unos 350 millones de euros, ha renunciado a realizar la citada inversión, después de que los bancos no aceptaran aportar una inyección extra de liquidez  colocando al grupo de ingeniería y renovables en una situación crítica.


La falta de apoyo bancario a una inyección extra de liquidez habría sido clave en la decisión, dijeron a Reuters dos fuentes el martes.


El grupo de ingeniería y renovables entra así en situación crítica. Su ampliación de capital se complica. El diario Expansión informa que la banca acreedora ha rechazado aportar liquidez por unos 1.500 millones de euros, considerada indispensable por Gestamp, que también buscaba frenar ciertas desinversiones del grupo sevillano.


Las acciones de Abengoa Yield, la filial cotizada en Estados Unidos, perdían un 0,6 por ciento en el Nasdaq.

La entrada de Gestamp, a través de su filial Gonvarri, habría permitido reducir la necesidad de captación en la ampliación de capital desde los 650 millones de euros previstos a los 400 millones.

Pero el proyecto de aumento de capital - inicialmente cifrado en 650 millones de euros - acumula polvo desde hace casi cuatro meses mientras la compañía trata de buscar inversores y financiación alternativa.

Abengoa ha perdido casi un 68 por ciento de su valor en bolsa desde finales de julio. El grupo registró a septiembre un flujo de caja negativo de 597 millones de euros a nivel de corporación, tras perder 194 millones de euros en los nueve primeros meses del año.

A últimos de septiembre, Abengoa acordó con los principales bancos acreedores una línea de liquidez de 165 millones de euros en el marco del aseguramiento de la ampliación a cambio de unas duras condiciones (entre ellas que los accionistas de control diluyesen su participación y representación en el consejo, que se acelerasen los planes de desinversión y se nombraran nuevos ejecutivos).

La auditora KPMG detectó recientemente unas necesidades de liquidez inmediata en Abengoa de unos 250 millones de euros en un informe encargado en el marco de la operación de entrada de Gestamp, dijo una fuente conocedora del informe.

La agencia de calificación Moody's rebajó la calificación de Abengoa el pasado 19 de noviembre mencionando el deterioro de su situación de liquidez , un nivel de caja que considera "insuficiente" y unos plazos demasiado largos.

Aunque la deuda bruta consolidada declarada asciende a 8.900 millones de euros, la exposición de la banca a la empresa y sus proyectos superaría los 20.000 millones de euros, según una fuente conocedora de la compleja estructura de la sociedad.

La magnitud tanto de la sociedad como de su entramado financieros pondrá presión también sobre los numerosos actores directa o indirectamente implicados.