El mercado bursátil español sigue marcando nuevos máximos mientras los inversores celebran un escenario optimista tras semanas de turbulencias. Sin embargo, Alberto Iturralde advierte sobre los peligros del excesivo optimismo que se percibe actualmente en las bolsas.
"La bolsa sube precisamente porque todo el mundo vende. Luego, cuando veamos a todo el mundo comprar, debemos desconfiar", ha explicado Iturralde durante su clase semanal, recordando cómo en apenas un mes se ha pasado del pesimismo absoluto a la euforia generalizada.
El experto en bolsa analiza con Laura Blanco el comportamiento del mercado tras el reciente optimismo y advierte sobre los peligros de la euforia inversora.
De la guerra arancelaria a la paz: un giro de 180 grados
Iturralde destacó el cambio radical en el sentimiento del mercado: "Desde el 7 de abril hasta el 11 de abril nos hablaban de recesión, mayor probabilidad de recesión, la economía de Estados Unidos hecha unos zorros, aparte de que los aranceles iban a ser caóticos. Hasta hoy hemos explicado que los aranceles tal y como se habían planteado no iban a aguantar ni hasta junio".
El experto señala la incongruencia del mercado: "A mediados de mayo ya se ha llegado a un acuerdo de 90 días, con lo cual todo el mundo a comprar. Y encima Putin con conversaciones de paz, India y Pakistán que por ahora dejan aparcadas las hostilidades".
Según el analista, hay que tener especial precaución ahora que el mercado muestra señales alcistas generalizadas: "Hay que huir del mensaje general de bonanza, que era todo lo contrario. Qué casualidad que cuando habíamos caído era un mensaje de recesión, y ahora oye, paz por aquí, paz por allá, el fin de los problemas arancelarios, se alejan los fantasmas de la recesión".
Laura Blanco subrayó esta contradicción: "Lo que choca es que en cuestión de un mes, que estamos a día 16 de mayo, como estábamos el 16 de abril sumergidos en el pesimismo total y absoluto por lo que podía suceder con la economía".