Además de la calidad y la rapidez en la que llegan las prendas a la tienda, Inditex repone dos veces por semana y el pedido llega en 24 horas, otros de los secretos es el sistema de identificación por radio-frecuencia.

Inditex ha invertido en tecnología más de 1.000 millones de euros en los últimos cuatro años. Como parte de esta inversión, y con el objetivo de dar una respuesta más inmediata a las necesidades de los clientes en tienda, Zara ha desarrollado en los últimos años una tecnología de identificación por radiofrecuencia (RFID, por sus siglas en inglés) que permite identificar individualmente las prendas desde las plataformas logísticas hasta su venta.

El RFID ha permitido a Inditex rediseñar todo el flujo de trabajo en sus tiendas, un salto cualitativo que se traduce en una mejora en los niveles de atención al cliente. El aspecto donde es más evidente el avance es la localización de artículos, que pasa a ser mucho más rápida y precisa.

De este modo, cuando un cliente busca una prenda concreta, el personal puede consultar la disponibilidad de ese producto en tiempo real en ese u otro establecimiento cercano o en zara.com, lo que facilita el proceso de compra. El mismo pago en caja de los artículos también se beneficia de esta tecnología, ya que el sistema RFID está integrado con la caja. Los datos guardados en la etiqueta de la prenda son eliminados durante el escaneado del código de barras, para proteger la privacidad de los consumidores.