Una oferta con sabor a rescate. KKR se lanza a comprar Telecom Italia, la que en la década de los noventa llegó a ser la mayor operadora de telecomunicaciones de Europa. El fondo estadounidense ofrece 50 céntimos y medio por cada acción de TIM, lo que supone una prima del 45%. Este precio supone valorar a Telecom Italia en 11.000 millones de euros. Pero Telecom Italia arrastra una deuda de 22.000 millones de euros, por lo que el valor total de la operación alcanzaría los 33.000 millones de euros.

Una oferta "friendly"

Este domingo los máximos responsables de la operadora estuvieron reunidos para abordar los diferentes escenarios que tiene la empresa por delante tras la oferta de fondo americano. Al término del encuentro, en un comunicado, Telecom Italia reconoció que KKR ha definido su acercamiento como friendly. El próximo viernes, la cúpula de Telecom Italia se reunirá para realizar una valoración formal de la oferta.

La oferta de KKR se produce en medio del desplome de las acciones de Telecom Italia ante la fuerte competencia del mercado italiano en el ámbito de la telefonía móvil.

Según se ha filtrado a través de diferentes medios, KKR estaría dispuesta a trocear la empresa a cambio de obtener el visto bueno del Gobierno italiano a la operación. Un paso imprescindible ya que el ejecutivo de Mario Draghi tiene acción de oro en TIM y por lo tanto, capacidad de veto. Por el momento, el Gobierno italiano ya ha mostrado sus satisfacción porque haya interés por los activos estratégicos italianos. Además, hay que tener en cuenta el interés de Italia por fortalecer a la operadora en un momento marcado por la recepción de miles de millones de fondos europeos con lo que, entre otras inversiones, se pretende desplegar la red de banda ancha por todo el país.

El fondo estadounidense tiene enfrente otro obstáculo: Vivendi. El grupo francés ostenta el 24% del capital de Telecom Italia. Una participación adquirida a un precio medio superior al euro. Por lo que Vivendi ya ha filtrado a los medios que el precio que ofrece KKR le parece insuficiente.

Mario Draghi