El pasado lunes, Wall Street vivió una de sus peores jornadas en la que el Dow Jones de Industriales llegó a perder 1.597 puntos. En la anterior sesión, la del viernes, el mismo indicador había terminado con una caída de 666 enteros."La explicación es fácil, la semana pasada el Bank Of America alertó de que se había desencadenado una señal de venta histórica de tal manera que el viernes ya se sabía", señala en Capital Radio José Luis Cava, analista independiente.



Para Cava no hay que buscar razones ocultas, "esta caída se produce por el propio fundamento del mercado". El recorte en todas las bolsas del mundo, está desligado del alza de las rentabilidades de los bonos ni tampoco a una posible recesión. "La economía mundial no va a entrar en recesión al menos hasta 2020", añade.

Las razones para José Luis Cava son claras. El nivel de liquidez de los fondos de inversión un nivel de mínimo histórico y los fondos de inversión americanos estaban sin liquidez. Por otro lado, añade el experto, el volumen de posiciones netas largas en bolsa había alcanzado otro nivel histórico y, finalmente,"nos encontramos con que el escenario era de un nivel de optimismo extremo y se ha desencadenado la fiebre vendedora".