Los mercados asiáticos cotizan a la baja después de la oleada de ventas en los estadounidenses en medio de las preocupaciones sobre el crecimiento global y la eficacia de la política del banco central.

El Nikkei de Tokio se mueve con subidas a punto de que termine la sesión. Las acciones de la minorista japonesa Fast Retailing son las que más están cayendo lo hacen hasta un 10% después de que la compañía haya presentado resultados. Cuentas que se han visto afectadas por la bajada de precios en una de sus marcas.

También nos fijamos en la historia del presidente ejecutivo de la minorista Seven Eleven en Japón. Ha anunciado que abandonará el cargo tras no sacar los votos suficientes en la Junta para renovar el cargo. Su decisión crea un vacío de poder en un conglomerado con 50.000 empleados. Y también indica un cambio en la gestión empresarial japonesa donde tradicionalmente cuenta con los grandes accionistas y miembros del consejo. Sus acciones han bajado más de un 8% tras conocer la noticia, aunque ya se han recuperado.

Los mercados chinos caen por tercer día consecutivo, encabezados por las empresas energéticas. En el lado de los avances, los productores de oro con repuntes en torno al 3%. En el foco de los inversores están los datos de inflación que conoceremos la próxima semana.

Entre los datos de referencia en China, los de reservas de divisas. Aumentaron ligeramente en marzo hasta los 3.200 billones de dólares. Es el primer incremento mensual desde noviembre aunque siguen siendo más bajas que cuando alcanzaron su pico en junio de 2014.

En el mercado de deuda, la rentabilidad de los bonos soberanos chinos a diez años experimenta su mayor caída semanal en diez años, en el de divisas, el yen sigue fuerte frente al dólar. En el resto de plazas tono mixto. En Australia, vuelve a caer la banca.