El Banco Central chino ha inyectado hoy en la economía 67.000 millones de dólares, su mayor movimiento diario mediante operaciones en el mercado desde febrero de 2013. Esta operación busca garantizar que las entidades de la segunda economía mundial dispongan de liquidez para las vacaciones del Año Nuevo lunar (8 de febrero), en las que se prevé un aumento del consumo.

El banco central chino ha canalizado el efectivo a través de dos tipos de acuerdo de recompra inversa (también conocidos como "repos"), un instrumento por el que se venden valores condicionados a un acuerdo para recomprarlos en una fecha posterior.
En concreto, el ente emisor ha concedido 55.000 millones de dólares, en "repos" a veintiocho días y otros 12.200 millones de dólares, en "repos" a siete días.

Desde que el 19 de enero se dio a conocer que el crecimiento del PIB de China en 2015 fue del 6,9 %, su cifra más baja del último cuarto de siglo, el emisor ha llevado a cabo cuatro inyecciones de liquidez.

Ya el 19 de enero introdujo alrededor de 91.000 millones de dólares, a través de tres canales: "créditos permanentes", "créditos a medio plazo" y "préstamos suplementarios con garantías". Un día después realizó una nueva inyección de 22.900 millones de dólares, en el mercado monetario mediante operaciones a corto plazo.

Finalmente, la jornada siguiente inyectó otros 60.800 millones de dólares, a través de "repos" a siete y veintiocho días.El banco central chino suele dar liquidez al sistema financiero en vísperas de las vacaciones del Año Nuevo lunar, la principal festividad del país.