Por qué el S&P 500 podría seguir de fiesta y subir otro 6% en los próximos 12 meses

Ver el S&P 500 en los 3.200 puntos será una realidad en julio de 2020. Es lo que cree JP Morgan siempre y cuando en la segunda mitad del año hasta cuatro estrellas se alineen: la de la política monetaria, la de la guerra comercial, la de los resultados empresariales y la de los estímulos corporativos.

El banco americano cree que la primera estrella, la de la política monetaria, va a ser la que más brille este segundo semestre. Están seguros de que hasta 19 bancos centrales van a relajar sus políticas, entre ellos, la Reserva Federal. Además, creen que la bajada de tipos del mes de julio está ya descontadísima y que ocurrirá.

A las que definitivamente no les va a hacer ningún daño es a las bolsas. Desde principios del mes de junio el S&P 500 se ha revalorizado un 9,8% gracias a las palabras de Jerome Powell, presidente de la Fed, que el 4 de junio aseguró que el banco estaba “preparado para actuar” si fuera necesario por el peligro que supone la guerra comercial para la economía de los Estados Unidos.

Y esa es otra estrella que también brillará este segundo semestre, según JP Morgan. El banco cree que habrá acuerdo entre Trump y Xi Jinping para finales de año. Pero algunos analistas opinan que a los inversores cada vez les da un poco más igual el conflicto comercial y que el verdadero motor son las bajadas de tipos.

Si comparamos, el día en que Powell pronunció esa frase ‘dovish’ el 4 de junio el S&P 500 llegó a subir hasta un 2,18% esa misma jornada, mientras que en la primera sesión después de la tregua comercial del G20, el índice solo consiguió repuntar un 1,3% como máximo, casi la mitad de lo que subió con las palabras del presidente de la Fed.

Otra de las preocupaciones es la de los resultados empresariales, porque después de que las estimaciones de beneficios de un 77% de las empresas de Wall Street fueran peores para este trimestre, JP Morgan no ve una recesión en los resultados. Es decir, no ve que en los próximos dos trimestres los beneficios vayan a caer frente a los tres meses anteriores.

Y la última estrella que se podría alinear sería la de los estímulos corporativos. El banco espera que la recompra de acciones se modere pero que las compañías estén más enfocadas en impulsar los dividendos.

Por el momento, JP Morgan es uno de las firmas con proyecciones más alcistas para el S&P. Aunque no todas son tan optimistas. De 17 que han publicado estimaciones sobre cómo terminará el índice a finales de año, solo 3 esperan que lo haga por encima de los niveles actuales.