"El euro está bastante sobrecomprado y es cierto que puede haber cierta estabilidad de cara a final de semana hasta que se produzca la reunión de Jackson Hole, pero lo lógico es que acabe corrigiendo y, por lo menos, se dirija a la zona de 1,15-1,14 en las próximas semanas", pronostica Oscar Germade, analista de BNP Paribas Personal Investors.

Las divisas son protagonistas en una semana marcada por el encuentro anual de banqueros centrales en Wyoming (Estados Unidos). Es la primera vez desde 2014 que acude el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, que previamente se ha encargado de rebajar las expectativas sobre posibles anuncios en el cambio de rumbo de su política monetaria. También la FED ha enfriado con sus actas de la última reunión la posibilidad de que haya una nueva subida de tipos en lo que resta de año.

Con Jackson Hole como telón de fondo hoy es el sector bancario uno de los principales acicates de las bolsas europeas, que recuperan el terreno perdido en las últimas sesiones, apoyadas también por el sector minero. Germade espera que a corto plazo aún hay riesgo de "recaída del mercado".