El proteccionismo que tanto auge está teniendo en los países occidentales no tendrá el efecto que se desea, porque "perjudica comercialmente al país que lo aplica, y no tanto a sus socios, para quienes, debido al libre comercio, les es más sencillo encontrar nuevas formas de suplir la carencia de esa relación comercial". Palabras de Alfonso Satrústegui, director ejecutivo de Caución y Riesgo Político de Aon España, para quien "cualquier traba comercial que se ponga en un país del que uno depende tiene demasiadas implicaciones negativas".



El sector energético ha sido el más afectado por los ataques terroristas contra intereses comerciales en 2016, ya que el 41 % de los atentados se han producido contra compañías de petróleo y gas, según el grupo asegurador AON, que prevé que esta tendencia continúe en el 2017.

Nigeria y Colombia son los países más afectados por el terrorismo contra las compañías de gas y petróleo, de acuerdo con el "Mapa de riesgo político, terrorismo y violencia política" que AON ha publicado esta semana.

En el caso de Nigeria, los ataques han supuesto una caída del 36 % en la producción de petróleo, afectando de manera directa a países que dependen de la producción internacional como Rusia, Venezuela o Estados Unidos.

En el caso del mercado de la energía, y más concretamente del petróleo, el precio ha sufrido los avatares de la economía en el pasado 2016, lo que ha llevado a muchos de estos países a emitir deuda para impulsar sus infraestructuras, y ahora deben pagar esa deuda.