Una empresa que no emita facturas deberá cerrar durante 48 horas. Con este castigo aprobado vía decreto el gobierno griego de Alexis Tsipras da un paso más en la lucha contra el fraude. Un fraude que en Grecia estás a la orden del día en el sector de la restauración y el turismo. Mientras se recuerda a los consumidores que “no están obligados a pagar si no reciben una factura legal”.

El gobierno griego también ha anunciado que los que los Inspectores de Hacienda realizarán 30.000 controles en destinos turísticos griegos. Esto controles se centrarán en las islas del mar Egeo, las que más ingresan por turismo y en las que el IVA ha subido del 13% al 24% tras abolirse la tarifa insular.

La suspensión durante 48 horas ya se ha aplicado a algunos negocios, mientras comerciantes de las islas griegas advierten de que con el trabajo de los cuatro meses de la temporada veraniega tienen que vivir todo el año. Algunos pequeños empresarios aseguran incluso de que si actúan como pide la ley, no podrían sobrevivir y justifican la evasión fiscal no como una opción, si no como una condición necesaria para sobrevivir.

Autónomos y propietarios de negocios griegos lamentan el cambio de las leyes tributarias del país y el incremento de la presión fiscal. En Grecia un autónomo con una base imponible de 20.000 euros anuales debe pagar este año un impuesto sobre la renta del 38,5 %; un pequeño comerciante incluso el 49,5 %.