Grecia ha pagado al Banco Central Europeo 3.400 millones de euros, correspondientes al rendimiento de los bonos helenos y a intereses, después de recibir el primer desembolso del tercer rescate.

El pago a la entidad monetaria coincide con el primer desembolso del tercer rescate, después de que el Mecanismo Europeo de Estabilidad diera luz verde a la concesión de un tramo de 26.000 millones y de que Alemania y Holanda dieran su visto bueno al nuevo programa. De estos, 10.000 millones serán transferidos a una cuenta especial del MEDE en Luxemburgo para la recapitalización y liquidación de bancos. Otros 13.000 millones los recibe Atenas para hacer frente a las devoluciones de préstamos y saldar las facturas domésticas atrasadas. El organismo informa de que otros 3.000 millones se desembolsarán el 30 de noviembre como tarde.

Según lo acordado, el programa tendrá una vigencia de 3 años y podrá alcanzar los 86.000 millones de euros. A cambio Grecia implementará duros ajustes en materias como las pensiones, el IVA o las privatizaciones, recortes equivalentes a entre el 4 y el 5% del PIB. Para vigilar el cumplimiento, habrá evaluaciones cada 3 meses, la primera en octubre. De esto dependerá que Europa decida valorar la reestructuración de la deuda. El FMI condiciona su participación en las ayudas a este alivio.