Según los datos publicados por el Centro de Investigaciones Sociológicas, la confianza del consumidor ha bajado en julio en 106,1 puntos.

Con respecto al mes de julio del año pasado, la confianza del consumidor ha bajado 2,2 puntos, lastrado tanto por la peor valoración de la situación actual como de las expectativas.

En julio los consumidores valoraron la situación actual en 101,7 puntos, 0,3 puntos menos que en junio, por la caída de la evolución general de la economía que pierde 6,2 puntos, y en menor medida, del mercado de trabajo con un descenso de 2,7 puntos y, por último, la percepción de la situación de los hogares que avanza casi 4 puntos.

Por su parte, el índice de expectativas se situó en 110,4 puntos con un descenso de 1,6 puntos con respecto a junio, después de que dos de sus tres componentes tuvieran un comportamiento negativo.

Además, el Indicador de Confianza del Consumidor, revela un descenso en las expectativas de consumo, aunque aumentan las de ahorro, así como unos mayores temores de inflación y de subida de los tipos de interés.