Los recientes procesos electorales en tres países europeos muestran un panorama político complejo, donde fuerzas centristas proeuropeas logran victorias ajustadas mientras la extrema derecha mantiene una presencia significativa.

Miguel Ángel Benedicto, profesor de Relaciones Internacionales en la Universidad Complutense, analiza esta situación en Capital Radio, destacando tanto señales positivas como preocupantes.

Crece el fenómeno antieuropeísta y populista en Europa: "La extrema derecha está muy fuerte"

Las últimas elecciones en Portugal, Rumanía y Polonia revelan un triunfo de los partidos más centristas con un fuerte auge de las fuerzas populistas.

Polarización persistente en el escenario europeo

En Portugal, pese a la victoria del partido de centro-derecha liderado por Montenegro, el profesor Benedicto señala que "Chega!, el partido de extrema derecha sigue muy fuerte, incluso casi empatado, incluso superando al Partido Socialista portugués". Sin embargo, destaca que existe un cordón sanitario que impide la entrada de este partido de extrema derecha al gobierno.

Respecto a la formación del próximo gobierno portugués, Benedicto pronostica: "Será un gobierno muy probablemente en minoría del centro-derecha. Yo creo que se va a establecer ese cordón sanitario. No creo que el centro-derecha pacte con la extrema derecha de Chega! y tampoco con el Partido Socialista". Esta situación augura un ejecutivo potencialmente frágil e inestable.

"Vemos como ese ascenso de esos partidos populistas y de extrema derecha es cada vez más patente, quizá porque la política tradicional no está solventando determinados problemas que acucian a la mayor parte de la población, como pueden ser el tema de la vivienda o el crecimiento económico"

Entre el europeísmo y las fuerzas iliberales

El caso de Rumanía presenta una situación donde, a pesar del avance de la ultraderecha, finalmente se ha impuesto el candidato proeuropeo. "Todos pensábamos que iba a ganar la extrema derecha, pese a esa injerencia rusa a través de las redes sociales", reconoce Benedicto, quien califica esta victoria como "una buena noticia" que "insufla optimismo de nuevo en la Unión Europea".

En Polonia, las elecciones presidenciales muestran una ligera ventaja del candidato liberal vinculado al primer ministro Donald Tusk, con un 31% frente al 29% del candidato conservador. El profesor advierte que la segunda vuelta, prevista para el 1 de junio, "tiene pinta de que va a estar muy discutido, muy reñido".

Al analizar estos tres casos, el experto considera que se percibe cierto equilibrio: "Por un lado vuelven las fuerzas más centristas, pero esa extrema derecha, esos partidos populistas, siguen fuertes". Esta situación da "un respiro a la Unión Europea y a los partidos más europeístas", aunque advierte que el fenómeno antieuropeísta, especialmente fuerte en Rumanía y Polonia, no parece ceder significativamente.