Los consumidores estadounidenses confían en la situación económica de su país a medio plazo. Es lo que se desprende del Índice de Confianza del Consumidor ofrecido por la Conference Board. La confianza de los consumidores ha crecido en el mes de julio hasta los 135,7 puntos, desde los 124,3 puntos del dato revisado de junio. El índice está muy cerca de los máximos de 18 años que alcanzó en octubre, cuando escaló hasta los 137,9 puntos.

Mientras, el índice de situación actual, que mide cómo los consumidores ven la economía presente, subió hasta los 170,9 puntos, desde los 164,3 de junio.

A pesar de este dato, este martes también hemos conocido que el gasto de los consumidores de EEUU registró en junio su menor ganancia en los últimos 4 meses. El gasto aumentó un 0,3%, según el dato ofrecido por el Gobierno estadounidense, en línea con lo esperado por los analistas. Los precios del Gasto de Consumo Personal, un índice vigilado muy de cerca por la Reserva Federal, crecieron un ligero 0,1% en junio, dejando sin cambios el incremento interanual en el 1,4%

A pesar de ello, los ingresos personales y los ahorros se incrementaron en el periodo. Los ingresos avanzaron un 0,4%, por cuarto mes consecutivo. La tasa de ahorro subió un 8,1%, una décima, para mantenerse en los niveles máximos de los últimos tres años.

Mercado Inmobiliario

Este martes, además, se ha conocido el dato de venta de viviendas pendientes del mes de junio en EEUU. Según la Asociación Nacional Inmobiliaria, creció un 2,8%, con avances en cada una de las grandes regiones, incluyendo un incremento de un 5,4% en el oeste del país. En tasa interanual, el aumento fue de un 1,6%, la primera ganancia de los últimos 17 meses.

Una vivienda se considera “pendiente” cuando el contrato se ha firmado pero la transacción no se ha cerrado. El índice de ventas de viviendas pendientes representa habitualmente el 20% de las transacciones de las casas existentes.