El crecimiento de la eurozona se desacelera en el segundo trimestre del año a un ritmo de expansión del 0,3% frente al crecimiento del 0,6% que se registraba en el primer trimestre. En tasa interanual el crecimiento de los países que comparten el euro es del 1,6%, mientras que la mejora de la economía en toda la Unión Europea alcanza el 1,8% Los datos están en línea con las expectativas del mercado.

Entre los países que registran los mayores ritmos de expansión figura España, con un 0,7%, y Alemania, que crece más de lo esperado. Cuatro décimas en el segundo trimestre frente a las dos décimas esperadas. Eso sí el dato alemán supone una moderación en los ritmo de crecimiento que eran de siete décimas en el primer trimestre. A favor de la economía germana entre abril y junio encontramos el comportamiento de las exportaciones, el gasto público y el consumo privado, que compensaron la debilidad en la inversión en construcción y maquinaria.

Entre los países que estancan su crecimiento figura Italia. Defrauda con un crecimiento plano debido al débil comportamiento de la industria y la demanda interna. Italia, la tercera economía de la eurozona, salió en 2015 de su peor recesión desde la Segunda Guerra Mundial pero la recuperación se ha ralentizado, poniendo presión sobre el primer ministro italiano, Matteo Renzi, quien ha consolidado su credibilidad en el restablecimiento económico del país.