2016 fue un año difícil para las empresas en muchos mercados desarrollados que ha debilitado la mejora en los procesos de insolvencia. Las quiebras corporativas globales disminuyeron un 3% en 2016, una marcada desaceleración frente a la mejora del 7% del 2015 y del 13% en 2014. El último informe de previsiones difundido por Crédito y Caución prevé que las insolvencias corporativas continúen disminuyendo en 2017, pero a un ritmo más lento, de sólo el 2%.



Los niveles de insolvencias en las economías periféricas de la zona euro siguen siendo elevados, pero en 2016 estaban mejorando con la excepción de Irlanda. España prevé una reducción del 10% en las insolvencias corporativas en 2017.

Entre las incertidumbres más importantes que podrían impactar en el clima corporativo global, el informe detalla el complejo calendario de la eurozona, con elecciones en Holanda, Francia, Alemania e Italia, el posible inicio de las negociaciones Brexit entre el Reino Unido y la Unión Europea, y la nueva Administración de Estados Unidos. De acuerdo con el informe, los cambios en las políticas económicas en estos mercados podrían ralentizar su crecimiento y transmitirse a otros a través de sus estrechos lazos comerciales y de inversión.