El Gobierno japonés ha revisado al alza el producto interior bruto entre enero y marzo, que creció un 0,5% en relación con el trimestre anterior, lo que supone una décima más que la cifra publicada en mayo.

En tasa interanual la tercera economía del mundo ha crecido un 1,9%, por encima del 1,7% preliminar. Esta mejora se debe sobre todo a que se ha revisado al alza el dato de consumo privado (+0,6% vs 0,5% inicial) y a que el gasto en capital ha bajado menos de lo esperado (-0,7% vs -1,4%). Sin embargo, se mantienen las dudas sobre las débiles exportaciones.

Esta revisión al alza llega una semana después de que el primer ministro nipón, Shinzo Abe, anunciara su decisión de retrasar hasta octubre de 2019 una subida del IVA prevista para abril de 2017 con el fin de no dañar el consumo. Además, los nuevos datos también reflejan un descenso más moderado de la inversión en capital corporativo, ya que este indicador pasó de una caída trimestral del 1,4% a un retroceso del 0,7%. Este segundo cálculo del PIB nipón concede cierto mayor margen de maniobra para el Gobierno de Abe, que además de posponer la subida del IVA anunció nuevas medidas de estímulo para el próximo otoño, pese a que la salud fiscal de Japón es la peor del mundo desarrollado.

MEJORA EL SUPERÁVIT POR CUENTA CORRIENTE

Además, Japón ha conseguido una mejora de su superávit por cuenta corriente de casi un 42% en abril. Se ha visto favorecido por la caída del precio del crudo y la mejora del flujo de turistas. La balanza comercial también arroja un saldo positivo en abril. Las exportaciones han bajado un 10,4% mientras que las importaciones han retrocedido todavía más, un 21,3%.