Estamos en la cuenta atrás para cumplir con la normativa del Real Decreto 56/2016, que nace de la Directiva Europea de Eficacia Energética (Directiva 2012/27/UE) y establece que antes del 14 de noviembre empresas, grupos empresariales y filiales de grandes empresas que cumplan la condición de gran empresa tendrán que haber auditado energéticamente el 85% de su consumo energético. En Inversión Inmobiliaria tratamos este tema con especialistas en la materia y llegamos a la conclusión de que la mayoría de las empresas no van a cumplir con esta fecha a pesar de exponerse a una sanción de hasta 60.000 euros.

El Real Decreto obliga a toda gran empresa con más de 250 trabajadores o una facturación de 50 millones de euros y un balance de 43 millones de euros a realizar la correspondiente auditoría energética de su actividad en España. Estas auditorías tendrán que estar realizadas y firmadas por un auditor cualificado antes del 14 de noviembre. Una vez realizadas, las empresas disponen de tres meses para comunicar al órgano autonómico competente la realización de la auditoria.

“Las grandes empresas lo tienen claro y la mayoría lo están realizando, sin embargo el RD no sólo pide la auditoría a estas grandes empresas también a los grupos de empresas y filiales que en su conjunto cumplan con las condiciones que dice el RD y en este ámbito las empresas tienen que tener en cuenta sus parámetros a nivel global o internacional y aquí es donde muchas empresas creen que no tienen que auditar y no es así tienen que sumar todo el grupo y ver si están  dentro del alcance del RD y creo que estas empresas son las que van a tener más problemas para llegar a esta fecha” explica Marta García, directora de consultoría técnica y energética de Tinsa.

“El Real Decreto nace de una directiva Europea, el 20-20-20 que se basaba en un 20% más de energías renovables, un 20% menos de emisiones de CO2 a la atmósfera y un 20% de reducción de la energía primaria. Y en España ya vamos tarde porque las empresas no han empezado a hacerlo tan deprisa como debería haber sido. No se trata de hacer una auditoría por cumplir un decreto sino  que la  eficiencia energética es una realidad y supone un ahorro sostenible que se mantiene en el tiempo”, Luis Miguel López Responsable de Energía y servicios sostenibles en Schneider Electric.

Vamos tarde como país no solo las empresas. De hecho, esta normativa Europea obligaba a todos los países de la UE a que las grandes empresas tuvieran su auditoría realizada el 5 de diciembre de 2015 y en España se retrasó a noviembre de 2016 dando un plazo más de nueve meses y estoy segura que recibiremos nuestra sanción”, explica Marta Garcia.

La sostenibilidad va más allá de la energía, hay más valores que incluyen el término de sostenibilidad como la salud y el confort para el ocupante. Así es importante ver el aire que se respira, la iluminación y el ruido, todo esto hace que un edificio de oficinas tenga un valor añadido y podemos llamarlo de sostenibilidad. Sin duda alguna, la eficiencia energética y el cambio climático son las claves de un edificio sostenible y es lo que más pesa a la hora de una valoración” Dolores Huertas secretaria técnica de GBce.

La calidad del producto va ligada a la sostenibilidad. En este sentido desde la Asociación Española de Oficinas (AEO)hemos desarrollado un modelo para la clasificación técnica de los edificios de oficinas que lo que establece es la calidad del producto del edificio para lo que manejamos 45 parámetros. Antes no existía nada de esto, pero hoy en día la calidad del edificio es fundamental para el que lo ocuipa, para el que lo gestiona y para el mercado en sí con el fin de atraer más capital y ser más dinámicos", apunta Carlos Bermúdez, director general de AEO.

Las certificaciones energéticas pueden ser una parte de la auditoría porque el Real Decreto lo que pide es que se controle como se está gestionando el gasto energético en los edificios y se puede elegir entre hacer una auditoría energética o puedes cumplir con la certificación ISO - 50001. “Nosotros hemos optado por la certificación ISO 500001 que es una de las opciones para cumplir con el RD que además es una propuesta de eficiencia energética dentro de una empresa que te permite una mejora continua” apunta Luis Miguel.

Schneider Electric, es una multinacional francesa que tiene 300 edificios, entre oficinas y fábricas y llevó a cabo un programa corporativo para ser más sostenible y reducir un 10 por ciento su consumo energético en 2011. “Se consiguió una reducción de 20 millones de euros en la factura eléctrica que al año era de 200 millones de euros. Partiendo de esto se empezó a poner en práctica el programa con nuestro edificio en París que fue el primer edificio del mundo con certificado ISO 500001, además de tener también otras puntuaciones adicionales como seis estrellas en el certificado de edificio sostenible. Después implantamos todo el programa en todos los países de la compañía. Aquí en España empezamos por nuestra sede en Barcelona. La metodología que seguimos fue: ¿Dónde queremos ahorrar? Qué queremos hacer? ¿Y Cómo? Y a partir de ahí se hizo un estudio en el año 2011 y en 2012 implantamos las primeras mejoras de eficiencia energética. Pero en 2013 nuestra sorpresa fue que en vez de ahorrar tuvimos un sobreconsumo. Esto quiere decir que no solo hace falta implantar mejoras sino hacer un seguimiento y gracias a ello nosotros volvimos a redefinir las mejoras que estaban implantadas y se hicieron otras adicionales y todo esto hizo que en 2014 tuviéramos un ahorro del 31% con respecto al 21% que teníamos como objetivo en el estudio previo”, afirma Luis Miguel López.