Las crecientes tensiones geopolíticas, el aumento del sentimiento proteccionista y las disputas comerciales que existen, están provocando una mayor incertidumbre y riesgo para las multinacionales con inversiones directas en el extranjero, según el Mapa de Riesgo Político 2019 publicado por Marsh. En el caso de España, pesa la incertidumbre política.



El responsable de riesgo político de Marsh España, Diego Fernández, explica en Capital Radio que se han juntado una serie de factores inusuales, como la crisis en Venezuela, el brexit o la guerra comercial. A ello se suman los ciberriesgos, las noticias falsas o la transición energética.

El mapa interactivo de Marsh clasifica más de 200 países y territorios, según su estabilidad política, económica y operativa, tanto a corto como a largo plazo, y ofrece información sobre los países donde los riesgos tienen una mayor probabilidad de ocurrir. El índice clasifica el riesgo de schock, “entendido como una potencial crisis económica en un país o un potencial cambio brusco en el panorama político”.

España obtiene una puntuación de 69,1 puntos, donde 0 significa poco estable y 100 muy estable. Fernández explica que ha pesado la caída en el subíndice de estabilidad política debido a la “moción de censura, el problema en Cataluña, la fragmentación del Congreso de los Diputados y el adelanto electoral”.

Respecto al brexit, Marsh reconoce que existe riesgo político por la incertidumbre que rodea a la salida de Reino Unido de la Unión Europea pero las empresas han tenido tiempo para prepararse y “no solicitan coberturas ante posibles impagos”.