La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha mejorado sus previsiones de crecimiento para España en 2015 y 2016, igualándolas a las del Gobierno, pero ha incidido en la necesidad de que el país continúe con las reformas para mejorar el clima empresarial o la situación del mercado laboral.

De este modo, se han elevado las previsiones de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de España en 2015 desde el 1,7% hasta el 2,9%, mientras que para 2016 el pronóstico pasa a ser del 1,9% al 2,8%.

Por otro lado, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico recortó su previsión del crecimiento económico mundial para este año, pero dijo que espera que los precios más bajos del petróleo aseguren una recuperación gradual, aunque la inversión débil sigue siendo una preocupación.