Reuters.- Los aranceles que impulsa el gobierno del mandatario estadounidense Donald Trump sobre productos chinos podrían entrar en vigor a comienzos de junio, según han señalado funcionarios que prevén consultas y posibles revisiones que retrasarían su aplicación.

El representante de Comercio de Estados Unidos, Robert Lighthizer, sostuvo que anticipa unos 60 días de discusiones públicas sobre la lista de productos gravados. El funcionario agregó que pasarían años antes de que la relación comercial chino-estadounidense llegue a "un buen lugar".

En declaraciones a CNBC, Lighthizer afirmó que la lista de aranceles que sumaría más de 50.000 millones de dólares incluiría "cosas en general de alta tecnología" elegidas por un algoritmo computacional para maximizar el efecto contra los exportadores chinos y minimizar al mismo tiempo el impacto para los consumidores estadounidenses.

El gobierno de Trump acusa a China de apropiarse de forma indebida y sistemática de propiedad intelectual estadounidense, algo que busca castigar con los aranceles, que además apuntan a forzar a Pekín a aceptar transferencias de tecnología.

"Los anunciaremos pronto y entonces tendremos un período de 60 días en los que le daremos al público la posibilidad de comentar sobre las cosas buenas y malas", dijo Lighthizer sobre los aranceles.

Mientras, China advierte a Estados Unidos que no abra “una caja de Pandora” y desencadene una serie de prácticas proteccionistas en todo el mundo, al tiempo que hizo referencia a productos estadounidenses que podría atacar en caso de una disputa comercial entre ambos países.

Pekín podría apuntar a una amplia gama de empresas estadounidenses, desde la agricultura hasta aviones, autos, semiconductores e incluso servicios, si el conflicto comercial se agrava, dijo el diario oficial China Daily en un editorial el jueves.

La decisión del presidente Donald Trump la semana pasada de fijar hasta 60.000 millones de dólares en aranceles sobre algunas importaciones chinas provocó la advertencia de Pekín de que podría adoptar represalias con tarifas de hasta 3.000 millones de dólares a los envíos estadounidenses.

Las mayores importaciones que China realiza desde Estados Unidos son aviones y equipos relacionados, soja y autos, y el año pasado ascendieron a un total de 40.000 millones de dólares.

"Las prácticas maliciosas de Estados Unidos son como abrir la Caja de Pandora, y existe el peligro de desencadenar una reacción en cadena que propague el virus del proteccionismo comercial en todo el mundo", dijo un portavoz del Ministerio de Comercio.

La línea oficial de China sigue siendo dura, incluso cuando Pekín dice que está abierta al diálogo y las negociaciones. La respuesta de los funcionarios estadounidenses y chinos sobre la naturaleza y el alcance de las negociaciones comerciales sigue siendo dispar, según reportes de medios.