Se confirma la ralentización de los precios en España en el tercer mes del año, la primera desde el pasado septiembre, cuando los precios recuperaron terreno positivo. Según los datos definitivos del Instituto Nacional de Estadística, el IPC crece un 2,3% interanual en marzo, siete décimas menos que en el mes anterior, aunque se mantiene en tasa mensual.

Detrás de este comportamiento está la bajada de los precios de la electricidad y los carburantes, frente a la subida experimentada en igual mes de 2016. Destaca la bajada de dos puntos del grupo de transporte, hasta el 6,5%, por el abaratamiento de los carburantes, así como la disminución en 1,5 puntos de la tasa de vivienda, hasta el 4,3%, por la reducción del os precios de la electricidad y, en menor medida, del gasóleo para calefacción.

Aun así, la de marzo es la séptima tasa positiva que encadena el IPC interanual tras ocho meses en negativo. Por otro lado, la inflación subyacente, que no incluye los precios de los productos energéticos ni de los alimentos no elaborados, baja una décima en marzo, hasta el 0,9% y se sitúa 1,4 puntos por debajo de la tasa general del IPC.