Más de 1.800 millones de personas utilizan fuentes de abastecimiento de agua contaminadas con bacterias fecales y 1.200 millones habitan en zonas de escasez hídrica, según el informe "Aquae Papers 7: El agua y los retos del siglo XXI", promovido por Fundación Aquae e Hidraqua, realizado en colaboración con la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) y el Colegio de Economistas de Madrid, y que aborda cuatro perspectivas diferentes para explicar los retos del agua.



El 80% de las aguas que retornan al medio se vierte contaminada. Estas aguas contaminadas, junto con la sobreexplotación de los acuíferos, ponen en riesgo las fuentes de abastecimiento de agua subterránea.

En España, el 27% de las hectáreas de regadío (978.000 hectáreas) dispone de un sistema de riego no modernizado, consumiendo un 40%-50% más de agua que los sistemas modernizados. "Estmos usando el regadío para producir basura económica. ¿Qué sentido tiene cultivar ciertas cosas, cuando es más barato comprarla? Usemos ese agua para otras cosas", apunta Ramón Llamas, director Honorífico del Observatorio del Agua de la Fundación Botín.

En 2050, la población llegará a los 9.700 millones de habitantes; y en 2100, hasta los 11.200 millones. "Vamos a perder población en Occidente, pero crecerá en los países en vía de desarrollo y en el Tercer Mundo", explica Juan Pablo, presidente de PWACS. Desde hoy y hasta 2050, el incremento de la población urbana será de 2.600 millones de habitantes. "Necesitamos planificación técnica de forma mundial y luego poner las herramientas para superar estos retos", señala Antolín Aldonza, presidente de la Plataforma Tecnológica Española del Agua.