Latinoamérica registra un crecimiento moderado respecto a otras economías emergentes, según informa Crédito y Caución. La región crece un 2,1% este año, cifra inferior al 3,8% del promedio de mercados emergentes a nivel global. Vanesa Santos, responsable de Comunicación de Crédito y Caución, destaca que México enfrenta un estancamiento económico con "crecimiento prácticamente cero" para este año, principalmente debido al impacto de los aranceles impuestos por Estados Unidos. Quiere decir que esa circunstancia lastrará la economía de Latam por su elevada exposición a los EEUU. "El 80% de las exportaciones mexicanas van a Estados Unidos, representando el 28% del Producto Interior Bruto", explica Santos.

La tasa arancelaria efectiva que México afronta actualmente se acerca al 10%, cuando antes era del 0%, afecta gravemente su economía. Las tres economías principales que impulsan la región son Argentina, Brasil y México, siendo esta última la más perjudicada por su dependencia del mercado norteamericano.

Escucha aquí todo lo que nos ha contado Vanesa Santos, responsable de Comunicación de Crédito y Caución

El Informe de Crédito y Caución | México lastrará el crecimiento de Latam por su exposición a EEUU

Más del 80% de las exportaciones de bienes mexicanos se envían a Estados Unidos, lo que representa casi el 28% de todo su PIB.

En 2024 ya empezó la caída

Según un estudio de Crédito y Caución, la economía de América Latina y el Caribe crecerá un 2,1% en 2025 y un 1,8% en 2026, lo que la mantendrá como la región de mercados emergentes con menor dinamismo. Los cambios en la política estadounidense están generando una presión externa significativa para la región debido a su proximidad geográfica y su integración económica. El país más afectado por la nueva política arancelaria es México, cuya ralentización repercutirá en el crecimiento de toda la zona.

El crecimiento del PIB mexicano ya se desaceleró drásticamente en 2024 hasta situarse en solo el 1,2%, lo que supuso un comienzo de año débil que se ha agravado con la guerra comercial. Más del 80% de las exportaciones de bienes nacionales se envían a Estados Unidos, lo que representa casi el 28% de su producto interior bruto. Las distintas tasas arancelarias que se han ido imponiendo a lo largo del año han elevado el tipo arancelario efectivo sobre las exportaciones de México a Estados Unidos de casi cero, a principios de año, al 9,5% actual.

En cuanto a Argentina y Brasil, la incertidumbre que generan las próximas elecciones generales están lastrando también las previsiones de crecimiento.

Además, la volatilidad de los precios del petróleo y la debilidad del dólar estadounidense suponen también un efecto negativo para el dinamismo económico de Latinoamérica porque, si bien la bajada de los precios del petróleo puede beneficiar a los países importadores, plantea retos para los que son productores, como México.
Venezuela es el país más afectado ante la amenaza de imponer aranceles del 25% a los importadores de petróleo venezolano. Esto ha provocado una caída de la producción petrolera, una disminución de las reservas oficiales, una depreciación de la moneda y un aumento de la inflación en ese país.

A pesar de estos retos, la mayoría de los países de la región siguen estando bien preparados para hacer frente a un entorno externo más exigente. El fortalecimiento de los marcos normativos, la independencia de los bancos centrales, la flexibilidad de los regímenes cambiarios y el aumento de las reservas oficiales son importantes pilares para la resistencia de estos mercados.