"El oro es un medio perfecto para ahorrar de cara a la jubilación", asegura Jens Weidenbach, director de Degussa en España, quien recomienda tener un porcentaje de nuestro cpaital invertido en metales preciosos. "Cualquier persona debería intentar ahorrar o preservar algo de su capital mientras trabaja", añade.



¿Y qué hacemos con ese oro? "El oro se puede tener perfectamente guardado durante 20 o 30 años, incluso más". Se trata de un metal que aguanta bien el paso del tiempo: no se oxida, no cambia de color, a diferencia de otros metales como la plata.

¿Qué características tiene que tener el oro para que el inversor pueda liquidarlo? "Es recomendable que sea oro de inversión: pueden ser lingotes o moneas de oro", explica Weidenbach.