Se avecinan cambios en el Banco Central Europeo. Al menos así lo indica Bloomberg. Según señala el medio estadounidense, la institución estará estudiando modificar su objetivo de inflación.

Hasta ahora el BCE tiene entre sus tareas favorecer la inflación hasta una tasa próxima pero inferior al 2%. Este objetivo, en cambio, podría tener los días contados. Ahora se estaría planteando adaptar su objetivo a la era que vivimos, después de la crisis financiera, con lo que podría además verse alterada su política de estímulos monetarios.

Podrían discutir sobre esto en la reunión que tienen programada para el próximo jueves.

¿Cómo ha ido hasta ahora la consecución de este objetivo?

A pesar de todas las inyecciones de liquidez y estímulos monetarios introducidos por el BCE durante los últimos años para paliar los efectos de la crisis, el IPC en la eurozona se mantiene lejos de su objetivo de inflación. El último dato que se ha publicado, que es la cifra revisada de junio, sitúa el IPC en el 1,3%.

La brecha existente entre este porcentaje y el objetivo de inflación justifica la puesta en marcha de una nueva batería de estímulos monetarios por parte del BCE. Las actas de su última reunión, la celebrada el pasado 6 de junio, recogieron que las expectativas de inflación dejan al banco central sin "margen para la complacencia". Vamos, que el BCE ya no sabe qué más hacer.

Entonces ahora el BCE estaría estudiando tres posibles alternativas para reforzar su política de estímulos: reanudar el programa de compra de deuda, bajar tasas (en particular la facilidad de depósito, fijada hasta ahora en el -0,40%) y retrasar de nuevo las previsiones para una futura subida de tipos.

Cambios en la cúpula del BCE

Las informaciones de Bloomberg sobre la posible revisión del objetivo de inflación se producen en pleno periodo de sucesión en el BCE. El mandato de Mario Draghi como presidente finaliza el próximo mes de octubre, y será entonces cuando la presidencia pase a manos de Christine Lagarde, un relevo que, según las firmas de inversión, evita a priori un cambio significativo de perfil. Esperan que Lagarde mantenga la misma línea dovish que Draghi.

¿Qué escenario se encuentra Lagarde?

La economía europea sufrió mucho durante la crisis, el BCE hizo todo lo que estuvo en su mano, ahora se supone que estábamos ya en la recuperación, pero los últimos datos ya vienen tiempo indicando una ralentización… y el BCE no ha comenzado a subir tipos, así que puede verse sin margen para actuar si la cosa se tuerce.

En este escenario, la cosa podría ir más allá. El objetivo de inflación no sería la única revisión que podría valorar el BCE. En meses anteriores las especulaciones apuntaban también a la posibilidad de que el banco central modifique la fórmula que utiliza para trasladar los plazos barajados para subir los tipos de interés.