El Gobierno mantiene su plan de subida de impuestos que ya tenía cuando llegó a la Moncloa, a pesar de la crisis del coronavirus. Lo ha confirmado la portavoz del Gobierno y Ministra de Hacienda, María Jesús Montero. Pero Unidas Podemos sigue defendiendo la "tasa de reconstrucción".

Lo ha confirmado hoy la Ministra de Igualdad, Irene Montero, en una entrevista en TVE, donde también abogaba por derogar la reforma laboral.

La Ministra de Hacienda explicaba que los Presupuestos Generales (PGE) de 2021 mantendrán el plan de impuestos del Ejecutivo de coalición. Su idea que siempre ha defendido el ejecutivo es la de la “justicia fiscal”, aumentar la progresividad, para que paguen más los que más tienen.

En el pacto de coalición entre el PSOE y Unidas Podemos y el proyecto de Presupuestos de 2019, que no salió adelante, contemplaba varias subidas de impuestos. Por ejemplo, el Gobierno quiere hacer cambios en el Impuesto de Sociedades, con un tipo mínimo del 15% para las grandes empresas y del 18% para bancos e hidrocarburos.

También entre sus planes, quiere subir el IRPF de dos puntos para rentas sobre los 130.000 euros. Subiría a cuatro a partir de los 300.000. También contempla un aumento de cuatro puntos en los tipos en rentas del ahorro por encima de 140.000 euros.

El Gobierno quiere además crear un impuesto a las transacciones financieras, la llamada “Tasa Tobin” y otro sobre las grandes tecnológicas, la “Tasa Google”, que ya se tramitan en el Congreso. Desde el Ejecutivo calculan que con las tasas Tobin y Google puede recaudar unos 2.000 millones.

Según Gestha (el sindicato de técnicos de Hacienda), los cambios en Sociedades aumentarán los ingresos en 3.500 millones y la subida en IRPF aportaría unos 7.000 millones más.

Y es que, según explica el Ejecutivo, la recaudación en España está siete puntos porcentuales por debajo de la media en Europa. En concreto, la proporción de ingresos públicos en relación al PIB es del 39,2%, frente al 46,5% de media de la eurozona.

Los Técnicos de Hacienda (Gestha) urgen al Gobierno, a los grupos parlamentarios y a las organizaciones sociales a que acerquen posturas para alcanzar un acuerdo que permita recuperar ingresos públicos y reforzar el Estado de Bienestar.

Recuerdan que el coronavirus provocará un “agujero” en la recaudación tributaria de 13.874 millones de euros, según las últimas previsiones económicas publicadas por el Gobierno. La economía se desplomará un 9,2% y el déficit público aumentará hasta el 10,3%.

Una "tasa de reconstrucción"

Ya a principios del mes de mayo, el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, abogaba por desarrollar una "tasa de reconstrucción" para que "los que más tienen" aporten más recursos a las arcas públicas a través del sistema fiscal. Esto se traduciría en un impuesto a la riqueza.

Esa tasa a las grandes fortunas que desde Unidas Podemos creen que servirá para canalizar la solidaridad como se hace “en los países serios”. Sustituiría el impuesto de patrimonio, alcanzando una recaudación del 1% del PIB, en torno a 11.000 millones de euros según cálculos de la formación morada (aunque algunos expertos han rebajado bastante esa cantidad).

Afectaría a los patrimonios superiores a un millón de euros y de forma progresiva. Habría un mínimo exento por primera vivienda de 400.000 euros.

Se gravarían con un 2% los patrimonios de más de un millón de euros, con un 2,5% los patrimonios de más de 10 millones de euros, con un 3% los superiores a los 50 millones y con un 3,5% los que superen los 100 millones de euros.

No obstante, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, enfrió los ánimos sobre ese posible impuesto y no hay nada confirmado.

En la rueda de prensa de este viernes, tras anunciar el ingreso mínimo vital, Pablo Iglesias ha reconocido que hay debat en el seno del Gobierno. Por su parte, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, decía que todo el Ejecutivo está comprometido con lograr una fiscalidad más justa. Pero no han dado detalles sobre ese posible impuestos a las grandes fortunas.

Algunos expertos apuntan a que subir impuestos en época de crisis es una mala solución, que puede además alejar la inversión. Por su parte, el Banco de España señaló recientemente que, tras la crisis por la pandemia, habrá que hacer reformas estructurales a medio y largo plazo. Entre ellas, elevar impuestos a las multinacionales y reducir gasto.

Desde Gestha, piden más ambición a la hora de incluir la responsabilidad solidaria de asesores e instituciones financieras que diseñan o colaboran en los entramados societarios fraudulentos y en los esquemas de planificación fiscal abusiva.

Los técnicos de Hacienda señalan como principales responsables de la evasión a los grupos empresariales que, con un aumento de beneficios del 40,5% desde 2006, ingresaron un 39,4% menos que hace 13 años. Además, la carga real del Impuesto de Sociedades en estos 13 años es menos de la mitad de lo que soportan las pymes.

Por eso piden a la Agencia Tributaria que desplace la lupa del control de autónomos y pequeñas empresas, que están padeciendo la crisis por el confinamiento, hacia los conglomerados empresariales, multinacionales y personas con grandes fortunas.

Pago de impuestos
Pago de impuestos