Bruselas ha abierto una investigación por un posible tax ruling de IKEA con Holanda que supondría una desventaja competitiva. La empresa sueca habría realizado acuerdos con el gobierno para evitar tener que pagar impuestos en países europeos. Como consecuencia, la empresa matriz de Inter Ikea Systems en Holanda recibiría un 3% de todos los ingresos de sus tiendas en Europa y no pagaría impuestos por ello. Al mismo tiempo se investiga que el gobierno holandés permita transferir una gran parte de ese dinero a una filial en Luxemburgo, según explica Ernest Urtasun, europarlamentario del grupo de Los Verdes encargado del informe sobre IKEA que ha aceptado la Comisión Europea. 



Las tiendas de IKEA en los países europeos, como España, no pagan impuestos debido a que transfieren parte de sus ingresos en forma de derechos de propiedad intelectual y de franquicia a otros países en los que no tienen que pagar impuestos, según recoge el informe. La Comisión Europea investigará si la cantidad de dinero dirigida a estos países está sobredimensionada para considerarse con el concepto de franquicia o de derechos de propiedad intelectual.

En caso de que la Comisión considerara que se ha producido el tax ruling, la sanción sería para Holanda por haber aceptado el acuerdo. Sin embargo, al obligarse al país a recaudar a IKEA lo que no se ingresó, se estaría castigando al país que ha firmado el acuerdo permitiéndole obtener dinero.

Ernest Urtasun considera que se ha avanzado en la creación de una unión fiscal real en Europa. Valora que ya se haya aprobado en el Parlamento una propuesta de ley para buscar una regla de cálculo común para la base del Impuesto de Sociedades, otra propuesta de ley con el objetivo de regular la limitación de la transferencia de beneficios entre países para el pago del IS y una que obligaría a las multinacionales a publicar cuántos impuestos pagan en qué país.