La cadena alemana de supermercados Aldi ha llegado a un acuerdo con la empresa Instacart para entregar productos de alimentación en tres ciudades de Estados Unidos. Se trata Los Ángeles, Atlanta y Dallas, en un movimiento que evidencia los cambios en el funcionamiento de la industria de la alimentación en el país. Hasta ahora Aldi no ofrecía la posibilidad de realizar compras online, con lo que esta prueba piloto en Estados Unidos es una manera de tantear a los consumidores americanos.

Un informe de la firma Nielsen publicado a principios de año apuntaba a que la compra de alimentación online pasaría del 4,3% del total en 2016 al 20% en el año 2025. Y como ha explicado el vicepresidente de compras corporativas de Aldi Scott Patton, aunque la compra online es todavía una parte pequeña del negocio, es un segmento en crecimiento.

El movimiento de Aldi en Estados Unidos se produce en un momento en el que la cadenas de distribución de alimentación están sumergidas en una guerra de precios en el país. Además, se esperan cambios en la industria después de que Amazon anunciara en junio la compra de la cadena de alimentación Whole Foods.

En junio Aldo anuncio la inversión de 3.400 millones de dólares para expandir su presencia en Estados Unidos y pasar de los 1.600 establecimientos actuales a 2.500 tiendas en 2022.