El fondo estadounidense Blackstone negocia con Banco Santander y en exclusiva la compra de más del 50% de los activos inmobiliarios de Banco Popular, que en su totalidad asciende a 30.000 millones de euros. En un hecho relevante remitido a la CNMV, el Banco Popular explica que la operación se cerrará en cuanto las autoridades europeas den su visto bueno.

Banco Popular, propiedad de Banco Santander desde el pasado mes de junio, reconoce que ha recibido en los últimos días varias ofertas vinculantes de inversores interesados en hacerse con una participación mayoritaria en sus activos adjudicados y créditos morosos.

Recordemos que el consejero delegado del Santander, José Antonio Álvarez, explicó el pasado viernes (coincidiendo con la presentación de resultados del banco), que confiaba en vender en el corto plazo al menos el 51% del negocio inmobiliario del Banco Popular. Santander considera su exposición inmobiliaria “demasiado alta” y pretende “reducirla rápidamente”.
La venta de una parte importante de los activos inmobiliarios de Banco Popular permitiría a su vez a Banco Santander reducir una tasa de morosidad que a cierre del primer semestre de 2017 se situaba en el 5,35% debido a la incorporación de Popular.