La cervecera danesa no cumple con las expectativas. Su beneficio neto interanual crece un 25% hasta los 251 millones de euros pero no coincide con lo esperado. Su beneficio neto operativo antes de extraordinarios  cae un 4% hasta los 463 millones de euros por el impacto de las divisas. A pesar de ello, mantiene su previsión de crecimiento anual por debajo del 5%.

El volumen de cerveza cae un 2% y el volumen total de ventas de la compañía decrece un 1% en el primer semestre hasta los 4.199 millones de euros. La causa del descenso se debe a los datos negativos en los mercados de Gran Bretaña, Polonia y Europa del Este. Por su parte, los ingresos orgánicos repuntan un 4%.

Según la empresa, las oscilaciones de las divisas podrían reducir las ganancias en 80 millones de euros en el conjunto del año. Los analistas estimaban una reducción de 74 millones. La cervecera se enfrenta a la debilidad del rublo en Rusia y a la reducción de sus ingresos por parte de Europa del Este que suponen un 17% frente al 30% de 2012.

La compañía danesa comunica que mantiene su pronóstico de crecimiento de beneficio para 2016 con el que pretenden una subida de 2 puntos porcentuales. Carlsberg se retira ya de aquellos mercados donde su crecimiento experimenta una desaceleración como es el caso de Malawi y algunas operaciones en Finlandia y Polonia.